Cansado

 Estoy muy cansado de que mi chica desconfíe de mí, trabajo en una tienda de ropa y cómo es normal tengo que decir lo guapas que están las clientas y lo bien que les queda la ropa, es parte de mi trabajo.

Siempre este está quejando de que me fijo mucho como mis en las chicas y les miro mucho como les queda el culo o los pechos con tal o cual ropa vestido o pantalón y camiseta

Yo le digo que es de formación profesional y que sabe que ella me tiene en sus manos porque es a quien quiero. Pero ella desconfía aunque yo le digo que en esos momentos es como si fuera gay no tengo ninguna pulsión sexual cuando les ayudo a colocar pantalón o el vestido y es necesario ajustar algún pecho o nalga.

Estamos tres en la tienda, Jesse ,James que es el dueño y yo. El jefe rara vez está allí salvo cuando viene una nueva campaña.

Jesse es una chica muy agradable y jovial, de muy buen aspecto a lo que ella dice que es parte de trabajo también

Dice que ha tenido mala suerte con los chicos por qué no le duran nada, yo creo que no busca bien, pero eso es cosa suya porque con 22 años aún está muy verde.

Ella conoce a mi chica y sabe lo celosa que es, me dice que le dé un susto que un día le diga que no aguanto más sus celos y que la dejo, pero hoy por hoy no puedo.

Una tarde que había venido una nueva campaña, acabamos muy tarde de recoger y colocar toda la ropa, estábamos solos y ya con todo colocado, empezó a probarse alguna de esa ropa que le hacía lucir muy muy bien y no sé cómo pero se me puso un poco gorda la verga se dio cuenta y me dijo que me acercara para colocarle bien la camiseta, mi verga seguía creciendo y después de colocar la camiseta bien, acerco su culo a mi cosa

Yo me aparte un poco y ella me dijo que no fuera tonto porque lo podíamos pasar muy bien y así además yo estaría en paz con mi chica por desconfiar de mí

Aunque mi verga ya estaba un poco durita y no necesitaba estimulación, ella me la jaló y me hizo una mini chupada para limpiar los restos de semen, yo me centre en sus pechos que aunque no muy grandes sí que tenían unos pezones deliciosos y muy duros ya

Luego apoyada en una estantería nos pusimos a coger muy rico me vine dentro de ella porque sabía que usaba anticonceptivos y no había problema alguno, me estaba volviendo loco escuchar como jadeaba con cada embestida y como ella se vino derramando su jugo a lo largo de mi verga, por suerte para cuando vino el jefe habíamos terminado y ventilado un poco el olor

No me sentí mal ningún momento por haber sido infiel pero yo no sabía que Jesse había dejado el móvil grabando lo todo y que luego me iba a amenazar con enseñárselo a mí chica

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Pero después de haber estado un tiempo preocupado por eso pensé que mi error ya estaba cometido y que si de verdad me quería acabaría perdonando