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miércoles, 30 de agosto de 2023

Necesidad natural 2

Habían pasado trece días desde la primera vez que nos vimos y puede que sea un cabrón por no haberme sentido culpable de ser infiel a mi novia , ah la que era mi novia.

Nuevo fin de semana, me llamó mi primo y lo primero que hice fue decir que no iríamos a mi casa porque luego se lían las cosas..., Me dijo que peor para mí porque ella le había dicho a su novia que había quedado bastante contenta esa noche y nunca se sabe y que tampoco pasa nada por un poco de sexo y que como dice el dicho : el que no rinde presencia abre camino a la competencia.

Estábamos los cuatro y aunque no era especialmente guapa ni estaba especialmente buena, me ponía muy cachondo y más después de haber estado entre sus piernas, no lo podía controlar usted me puso muy dura y supongo que ella sabía que me excitaba mucho.bebimos, hablamos reímos y bailamos, acercando mucho los cuerpos, seguro que noto mi erección.llevaba minifalda y un top. Me me vino el pensamiento de ponerme a su espalda agarrar sus pechos levantar un poco su minifalda y ya sabéis que 😈 pero no era el momento.

Llegó la hora de ir a casa y ni ella ni yo querían quedarnos con las ganas y me dijo de ir a su casa, tenía el coche allí mismo y casi sin despedirnos nos fuimos, íbamos muy cachondos ella conducía y yo iba a acariciando sus pechos y su panocha.

Pasamos casi corriendo a su casa, nos sobraba la ropa y me un tirón le saque el top liberando sus pechos ella se quitó la minifalda llevaba nada debajo, yo me baje el pantalón y mi verga dura quedó apuntando hacia ella.

Me llevo a su cuarto y dijo que hoy le tocaba a ella mandar, me empujo a la cama y se subió encima de mí, jugó un poco con sus manos en su panocha y empezó a meter mi pene en su vajina casi de golpe, primero esté apoyo en mi pecho para cabalgar y luego se puso a cabalgar suelta de manos hasta que me corrí, se giró y ahora me daba la espalda y agarre sus pechos mientras seguía cabalgando y se corrió ella. Luego me me dediqué a limpiar sus jugos con la lengua recorriendo todos los pliegues de su panocha...




lunes, 28 de agosto de 2023

Necesidad natural

 Otra vez solo, después de las vacaciones de verano mi chica volvía al trabajo como tantos años, estaba claro que nos queríamos mucho, muchísimo pero cómo aguanta una relación en la que veinticinco días al mes mantienes una distancia de 250 km con tu pareja. No se sostiene el vínculo, desde el principio la idea era que no volvería a irse pero pasaba el tiempo y todo seguía igual.


Nos despedimos muy cariñosamente y con calma, no había ninguna prisa, ya tenía todo preparado y metido en el maletero del coche, se había duchado y vestido mientras yo la miraba admirando su cuerpo, ese cuerpo que la noche anterior se había entregado a mí o mejor dicho , ese cuerpo que la noche anterior me había poseído sin piedad hasta dejarme seco y agotado.

Por esos momentos se podía decir que era todo perfecto, no solo por el sexo, por todo el. Pero se repetía el momento del adiós o hasta luego, un hasta luego demasiado largo para los dos.


Y que bien viene que haya diablo para echarle las culpas, una semana después salí con un par de amigos a tomar unas cervezas a un bar nuevo. Cómo ser nuevo tenía promociones de bebidas baratas regalo de chupitos, estaba lleno de gente de todo tipo de edad, yo estaba en un punto medio a mis 25 años y no tenía problema para relacionarme con casi nadie.


Tomamos las cervezas hablando de todo y ellos se marcharon cuando yo acababa de pedir otra, como no soy de despreciar el trabajo de la gente que las hace y me quedé a terminarla, llegó mi primo con su novia y una amiga de ella, todos nos conocíamos perfectamente, alguna vez mi primo me había dicho que dejara a mi novia porque así él por lo menos no podría vivir tanto tiempo separado de su chica.


Otra cerveza, la amiga de su chica me miraba seductora, su chica bebió demasiado y fuimos a mi casa para que durmiera un poco y descansara, la deje tendida en la cama mientras hablaba con mi primo y la amiga estaba vigilando por si vomitaba.


Al rato fuimos a ver qué tal iba todo y estaban las dos desnudas y tocándose, al vernos la chica de mi primo se rió y pidió su "medicina" para ponerse bien, mi primo se sacó la polla y las dos se la chupaban.

Yo salí fuera para que se divirtieran los tres.


Después de oír como se corrían un par de veces, la amiga de la chica de mi primo salió fuera también con las tetas un poco cubiertas de leche y me dijo que si es que yo no me lo quería pasar bien, que no fuera tonto. Yo pensaba en mi chica, me había acostumbrado al sexo por videollamada que tenía con ella dos veces por semana. Pero sin buscarlo estaba allí en mi casa con dos chicas en pelotas y con ganas de jugar. Pase al cuarto y pude ver que mi primo le había estado dando por el culo a su chica bien porque lo tenía muy abierto, también tenía los pechos y la tripa cubiertos de leche, la amiga me bajó el pantalón y se puso a chuparmela paró un poco y dijo que lo quería todo en su boca.


De pronto me olvide de mi chica y le llene la boca de leche con la que hacía gárgaras y jugaba, se puso a cuatro patas al lado de la chica de mi primo para que pudiera jugar a meter en los dos culos uno u otro, mi primo estaba sentado mirando y diciendo que le diera duro a su novia, que las agarrara del pelo y las hiciera gritar.


La noche pasó y y los días siguientes, trate de olvidar como le había sido infiel a mi chica, pero el recuerdo seguirá allí para siempre






sábado, 26 de agosto de 2023

Las cosas cambian

 Las cosas cambian, el mundo está en cambio constante y pues yo también ja ja. Siempre he sido muy sexual, por suerte o por desgracia las tetas empezaron a crecerme pronto, con 15 años era la que las tenía más grandes de todas las niñas de mi curso y aunque los niños todavía estaban sin madurar, un par de chicos de cursos mayores se fijaron en mi y yo aprovechaba cada recreo para "jugar" con ellos a los médicos, me tocaban y los tocaba y qué sorpresa cuando veía que su cosa se ponía dura.


Creo que los tres estábamos aprendiendo aunque ellos tuviesen su aprendizaje un poco más avanzado. Me encantaba como chupaban mis tetas y como me acariciaban ahí abajo y pasaban su lengua por mi cosita.


Después empezamos con las pajas tanto de ellos a mi cómo yo a ellos, recuerdo una vez que me comieron muy bien el coño y al volver a clase mi pantalón estaba muy mojado y algunos compañeros decían que me había meado.


Pasó al go de tiempo y ya no nos valía con las pajas, descubrí el sexo y aunque tenía pareja, a veces no era capaz de cumplir eso de la fidelidad, a mi chico en principio le molestó muchísimo, pero como ninguno de los dos sabíamos cuánto iba a durar la relación, pensó que él también tendría vía libre con otras y la relación fue perdiendo sentido.


Ahora aunque no me niego a una polla, estoy explorando la otra parte, desde que como creo toda chica con sus amigas les ha tocado las tetas y ha besado tonteando. Un día bromeando con una amiga sobre que los tíos no van a aprender nunca a a comer coño, hablamos de cómo nos gustaba a cada una que nos lo hicieran y nos lo comimos una a la otra.

Fue muy muy placentero, mucho más sensual y delicado que cuando lo hace un tío, más sensible, otro mundo.

A las dos nos encantó y pensamos repetir las veces que haga falta.


No soy lesbiana, pero no por ello me voy a limitar a las pollas





viernes, 25 de agosto de 2023

Cantos de sirena

 Ese año habíamos decidido que las vacaciones las iniciaríamos los chicos solos hasta que tres días después por motivos de trabajos vinieran también las chicas, nuestras parejas. Ya nos conocían bien y sabían que lo peor que haríamos solos era beber mucho mucho y puede que un poquito de droga blanda, nada grave.


Así fue, bebimos como posesos, sin ser conscientes de problemas cardíacos, respiratorios o gástricos, ya después de vacaciones volveríamos a la rutina y las visitas a médicos que nos prohíben cualquier tipo de exceso, pero estábamos de vacaciones y solos.


Hablamos de nuestras parejas, de la pareja de los demás de la cantidad de cosas que le haríamos a cada una, no había posibilidad de ofensa ni de enfado puesto que éramos muy amigos y sabíamos que lo que estábamos diciendo solo eran ilusiones animadas por el alcohol.


Faltaban dos días para que vinieran las jefas y otra noche nos volvimos a emborrachar sin saber cuando parar de beber. Esta vez, yo me retiré antes porque me estaba doliendo la cabeza y no me apetecía beber.


Aunque estaba de vacaciones, mi cuerpo seguía sus costumbres de levantarme temprano con las primeras luces del día, el dolor de cabeza había desaparecido y me apetecía ir a dar un paseo por la playa cuando todavía no está llena de gente. Me vestí con un un bañador una camiseta de manga corta y unas chancletas cómodas y me fui a inspeccionar la playa tranquilamente.

Me estaba gustando mucho el paseo para relajar mi y estirar las piernas.


La auténtica sorpresa llegó cuando vi una chica de unos 25 años que se estaba lavando o quitando la arena la orilla de la playa, estaba desnuda y yo evite establecer contacto con ella para no ser un mirón, yo solo había salido a caminar, pero estaba tremenda y de ver como enjuagaba sus nalgas y pechos, no podía apartar mi vista de este espectáculo pero cambie un poco mi rumbo.


Todo controlado ahora mi vista se dirigía al camino de vuelta, pero la chica dio un pequeño grito solicitando mi ayuda por qué se le había dormido un pie y no podía salir del agua, la ayude sujetándola entre mis brazos y sacandola a la orilla, en el transcurso del viaje de unos cinco metros pude apreciar bien sus pechos gorditos sus labios gruesos y sus piernas y nalgas muy duras. No era ser baboso es que la estaba sujetando mientras íbamos a la arena y se notaba.


Parecía brasileña por como hablaba, pero nos entendíamos bastante bien, se quedó tumbada en la arena haciendo topless, aunque ella ya estaba muy bronceada decía que le gustaba sentir el sol sobre su piel. Cuando ya decía que estaba recuperada yo empecé a despedirme y ella me dijo que si me había gustado la playa, la playa y las vistas, jeje


Sí claro que me ha gustado ver la playa


Solo la playa?


(La cabrona me había visto babear)


Y las vistas también


Sí, se debe disfrutar de todo


Le hablé un poco de mi situación que estaba con unos amigos y que en día y medio llegarían nuestras esposas,...


Pero ahora estás solo aquí conmigo, ayudándome y yo querría agradecer tu ayuda, con un beso, sabes que solo con un beso puedo hacer que te corras?


Ja ja un beso donde?


En la boca, no seas mal pensado


Me temo que no te creo


Déjame probar

Me beso con sus labios gruesos y su lengua juguetona y me calentó bastante pero no me corrí y le dije que no era verdad lo que decía.


Déjame intentarlo otra vez y ya verás.

El beso me había gustado mucho y no tuve problema en repetir la sensación de verme atrapado por unos labios gruesos y una lengua muy activa dentro de mi boca.

Pero tampoco me corrí aunque note algo de actividad de mi pene


Nada no debe ser hoy el día jejeje


Dame un tercer intento por favor que si no me deprimo por haber perdido mi poder


Volvió a besarme y ahora sujeto mis manos y las puso sobre sus pechos, moviendo las y apretando para que palpase bien.


Tampoco me corrí, pero me la despertó bien dura y ahora fui yo quien la beso, me maje el bañador de forma que mi pene quedaba justo apuntando a su entrepierna.


Se puso a reír supongo que porque había conseguido su objetivo. Sin hablar me la meneo soltando mi esperma al mar. Me la comió un poco para que se me pusiera dura y metidos en el mar cogimos hasta que estábamos agotados.


Me había gustado muchísimo lo que había pasado y le preguntes si podíamos quedar más veces,

 pero me dijo que las sirenas no repetían con humanos.

En 5 meses estaba divorciado y los cantos de sirena me estaban haciendo perder la cabeza 




jueves, 24 de agosto de 2023

Tradicional y actual

 No entiendo la sociedad actual de España y no sé si de más países en lo referente al sexo, esas modas de pansexual y demás palabras raras para definir una atracción sexual consumada o no. Toda la vida ha habido heteros, homosexuales y alguno o y alguna que se apañaban con animales domésticos o rurales, creo de hay mucha tontería ahora, no nos van a enseñar ahora a follar.


Mi historia va de algo así, una tarde que había quedado con una amiga y un amigo, qué es gay sin ocultarse de nada ni de nadie, aunque a mi al principio me causaba un poco de rechazo, ya no lo veía como algo peligroso para mí, que tontería era un amigo más con gustos distintos a los míos y mundo.


Fuimos a su casa y como los tres sabíamos a lo que íbamos, no tardamos en ponernos a ello, después de desnudarnos jugando con unos dados, cada vez que lanzabas los dados y los dos eran pares te quitabas algo, una tontería de juego pero que la idea de ver desnudos a los otros de calentaba


Entre risas nos fuimos quedando desnudos y empezamos a acariciar cuerpos, no tardo mucho en despertar mi polla y el se puso a pajearme, primera vez que me la meneaba un tío. Yo estaba con la cabeza entre las tetas de ella, besando lamiendo y chupando todo lo que tenía alrededor, tenía unos pechos muy bonitos, no grandes pero como dice el dicho "la buena teta en la mano quepa"


Ella le hizo una paja a él y luego después de dudar un poco nos pusimos los dos a comerle culo y coño e ir metiendo dedos. Cuando ya se había corrido, empezaba lo mejor, este puso a cuatro patas y mientras se la chupaba a él yo me la follaba, luego fue el quién se puso a cuatro patas y yo quién se la metía por el culo y el le comía el coño.


Estuvimos jugando un buen rato y probablemente no tardemos en repetir, que eso del poliamor no es nada nuevo, aunque llamarme antiguo si queréis pero mi culo no acepta la entrada de algo más que un dedo




miércoles, 23 de agosto de 2023

Feria




Una compañera de trabajo me invito a ir a su casa para que conociera y disfrutara de la feria de su pueblo, perdón su ciudad y que no me oiga decir pueblo porque allí se toman muy a pecho que son una ciudad, hay unos cuarenta mil habitantes y tienen algunas industrias muy potentes. La gente es amigable y claro está, más en época de feria.


Me presento a su cuadrilla de amigos y pues como en todos los grupos de amigos, siempre hay: los guapos, los LISTOS oh que se creen listos, los normales, que suelen ser mis favoritos y los diferentes que van a su puta bola y no se relacionan demasiado con los demás. Todo esto en los dos géneros, tanto chicos como chicas.


Me fui un jueves por la tarde sin saber cuánto aguantaría allí, pero pensando que una feria siempre es sinónimo de pasarlo bien. Estaba cómoda.


La noche del viernes era especial porque había un concierto de un grupo bastante famoso, como probablemente iba a saltar y bailar mucho en el concierto, en lugar de vestido y tacones, me puse un pantalón vaquero una camiseta blanca y mis zapatillas. El ambiente estaba muy animado porque habían venido gente de otras poblaciones y estaba a reventar.


En mitad del concierto tuve que ir al baño y cuando había cubierto mis necesidades recién salida del baño se me acercó un tío, qué debía andar por la décima Copa de más y me dijo:


Ven guapa que yo sé lo que tú quieres, lo que a ti te gusta


Me asusté un poco, pero cuando lo vi bien, que con la destilería que llevaba en las venas, poco más que hablar podía hacer, me relajé y volví al concierto observando como otro chico que debía ser amigo suyo, se le acercaba y le decía que no buscase broncas. Este último era bien parecido y tenía una voz ronca que me pareció atractiva.


El concierto terminó y después de seguir bailoteando un par de horas más volvimos a casa.


Al día siguiente, le hablé a compañera del tío del baño, del borracho y me dijo que le gustaba mucho beber pero que era buen chico que no tenía peligro. Después con disimulo le hablé del otro tío y me dijo que sería alguno de sus amigos.

Me intrigaba ese hombre esa voz ronca que puede que no volviera a oír nunca.


Viernes noche salí con los amigos de mi compañera y lo típico: comer algo beber y bailar, y bailar como no? Visitar los baños.

Esta vez después de haberlo hablado con mi compañera estaba tranquila y sin ningún miedo. Sería demasiada casualidad que el tío de ayer también estuviera por allí y ciertamente no estaba. En el fondo me hubiera gustado ver al otro, al de la voz ronca pero nada por allí. 

Aunque diez metros más allá del baño, lo escuché y parecía que me llamaba, con insistencia:


Eh chica!!! Oye chica, perdona


Sin estar segura de que me hablaran a mí, me giré y lo vi mirándome y gesticulando. Deje que esté acercará a mí y me pidió perdón por lo de su amigo el día de antes. Estuvimos hablando un rato, no hay nada como ser de fuera para que te fichen, ya sabía que era compañera de trabajo de una chica de allí sabía más o menos mi edad… y yo riéndome por todo lo que sabía de mí le dije que me contara algo de él, era un año menor que yo, aunque su aspecto fornido no lo indicase, estaba separado desde hacía un año y medio y había venido unos días a la feria porque trabajaba fuera.


Su voz y su mirada clara que no escondía nada, me habían seducido y no es que yo sea una fresca que va por ahí liándose con todos, pero este tío tenía algo especial y no sé si el pensaba igual de mi, pero yo pensaba que era algo mutuo. La conversación era interesante y me apetecía seguir hablando con él, que me invitó a una copa, lo deje un momento para ir a decir a mi compañera que estaba bien y que estaba con el amigo del del concierto, no sé que cara me vio que me dijo anda sé buena pero no del todo jejeje


Regrese donde estaba el y seguimos hablando, su voz ronca seguía haciéndome sentir un cosquilleo y sus brazos tórax y espalda fuertes me atraían mucho, le dije que si no le importaba que nos fuéramos un poco de allí porque había demasiado ruido, no sé si pudo pensar que le estaba diciendo que quería follar o que? Porque me miró raro, cuando yo caí en la cuenta de que podía haber pensado eso, aunque no había sido así, pensé que sería un muy buen recuerdo de esa feria.


Nos alejamos unos 70 metros de todo el follón y aunque esté guía habiendo ruido podíamos hablar muy bien. Agarre sus manos fuertes y suaves y le dije que seguro que no nos volvíamos a ver y que por eso me apetecía tener un buen recuerdo suyo en mi memoria y lo besé, me agarró por la cintura y hoy que sí llevaba vestido de tirantes lo abracé y supongo que pudo notar mis pezones un poco duros. Estaba claro lo que iba a pasar y me dijo que si íbamos a su coche o a su casa que estaba a tres cientos metros, en esos momentos no podía pensar mucho pero le dije que mejor en casa. Llegamos y eran las dos de la mañana, iba muy excita y mojada, él también por qué al segundo de bajarse el pantalón, su herramienta ya estaba medio dura y cuando yo me quite el vestido, era un palo, besos y abrazos y le hice una paja que hice que terminara en mi boca con mi lengua jugando en su capullo. Me dijo que le habría gustado follarme pero que ahora había que esperar un poquito para que se le levantara otra vez y se puso a jugar con mis pezones y meterme un dedo por el culo y lamer mi vulva buscando y jugando también con mi clítoris y su lengua, me corrí, su pene volvía a estar un poco duro, me apetecía cabalgar y lo hice hasta que me volví a correr mientras el jugaba con un dedo pulgar sobre mi clítoris y apretaba mis pechos alternativamente con la mano que le quedaba y seguimos haciéndolo hasta quedar exhaustos y dormidos


Me quedé a dormir con él y cuando me desperté contesté a todos los mensajes que mi compañera me había enviado.






lunes, 21 de agosto de 2023

Irma

 Hola soy Irma una mujer de 32 años, cansada de los hombres y más aún después de haber roto con mi marido. Llevábamos ocho años casados y se suponía que todo iba muy bien, en todos los sentidos, habíamos tenido suerte y ya habíamos pagado la casa por completo, la convivencia era estupenda, no sabíamos vivir el uno sin el otro y el sexo era todavía mejor, cualquier instante era bueno para hacerlo. El aroma de nuestra casa era el de su polla y mi panocha, algún amigo y amiga que había venido de visita nos dijo que este olor lo habían puesto cachond@, no nos importaban esos comentarios y lo que empezamos a hacer fue invitar algunos a pasar alguna noche con nosotros.


Solo era para sexo, sin nada más allá del cariño que le puedes tener a un amigo o amiga. Lo que pasa es que como el roce hace el cariño, tanto roce de la polla de mi chico con una de nuestras amigas, hizo más que cariño, empezó viniendo a casa cada 15 días, luego semanalmente y después dos o tres veces por semana.


Yo no soy celosa y me guían que los tres lo pasábamos muy bien. Esta amiga tenía dos años menos que nosotros y creo que nada especial: delgadita sin mucho pecho y eso sí un culito respingón, también había que añadir que era bisexual y nos lo hacía muy bien a los dos, era muy alegre y simpática.


Aunque yo no era celosa, empecé a notar que mi chico hacía cosas raras como desaparecer de casa sin haber comentado antes que tenía que salir a hacer algo y cuando empezó a no follarme como antes que siempre estaba deseando estrujar mis tetas, pasar su lengua desde mis pezones hasta llegar a mi vulva dando un rodeo para hacerme sufrir la espera, comiéndome también los músculos y las nalgas, para volver a mi vulva que ya estaba casi goteando y saciarse con mis caldos mientras jugaba metiendo y sacando sus dedos de mi vagina y absorbiendo mi clítoris con sus labios y su lengua hasta que me arrancaba el primer orgasmo, me volvía loca.


Pero lo que de verdad me volvió loca fue verlo a escondidas, una tarde de esas que desaparecía por sorpresa, yo también salí y lo seguí, estaba con nuestra amiga, que parecía ser más amiga de él que mía por como se reía n y la forma apasionada de besarse.

Estaban en un bar y curiosamente los dos sintieron ganas de ir al baño a la vez, fueron al de chicos los dos y pasado un minuto pase yo también y allí estaba el pastel, ella con la camisa quitada y las bragas majadas, él con el pantalón bajado y comiéndole todo, no hacían casi ruido aunque la cara que tenían y los gestos de placer eran enormes.

Cuando me vieron se quedaron de hielo y medio tartamudeando dijeron que que sorpresa que sí yo también me iba a unir a la fiesta,


En ningún momento habíamos puesto límites a lo que habíamos estado haciendo, pero yo me sentí un poco apartada de ese lío que teníamos los tres por qué habría sido muy fácil haberme comentado esos encuentros que tenían los dos, no pasaba nada, pero el hecho de no haberme dicho nada me hizo sentir fatal porque cada vez eran más las veces que mi chico se esfumaba como el humo.


Y llegó el día que mi chico desapareció por completo, al llegar a casa me encontré una nota en la que decía que lo sentían mucho, que me había querido muchísimo y lo seguía haciendo pero que también quería mucho a la chica y que le gustaría empezar algo a solas con ella, que me quedara la casa para mí sola.

Me habían roto y desde entonces no confío en ningún tío ni en ninguna AMIGA, solo salgo de fiesta y cuando encuentro algún chico interesante, lo uso como un tampón, lo meto entre mis piernas y cuando ha cumplido su función lo desecho


Cuando me canse de esto puede que busque un hombre con el que compartir mi vida pero creo que falta mucho para eso




domingo, 20 de agosto de 2023

Pasaje del terror

 Desde que mi mujer me había dejado, intentaba pasar el máximo de tiempo posible con mi hijita, que ya tenía diecisiete años pero seguía siendo mi hijita, era muy guapa, su madre había hecho un muy buen aporte de genes, ojos color miel, esbelta, pechos no muy grandes pero muy bien colocados y bueno no digo más porque es mi hijita además era muy amable, trabajadora y también muy simpática.


Para aprovechar un fin de semana que iba a pasar conmigo y recompensar sus buenos resultados en el colegio, le hablé de visitar un parque temático del que ella me había hablado muchas veces.

La idea era pasar allí desde el viernes por la tarde hasta el domingo por la noche,


Ponía que solo teníamos que llevar pañales, porque nos íbamos a cargar de miedo, jejeje.


Llegamos y nos nos enseñaron las instalaciones: siete dormitorios, uno de los cuales era para mi hija y para mí, un baño, una cocina y una sala en la que podíamos cohabitar con el resto de clientes. No tenía mal aspecto, lo malo o lo bueno era que estábamos solos, no había más gente ese fin de semana, solo el personal y nosotros.


Después de acomodarnos en la habitación y el típico susto, qué no asustan a nadie de Frankenstein de pega y una niña con una cicatriz en el cuello como de haberle cortado la cabeza, más que miedo me dio risa y me dispuse a esperar que pasaría esa noche. Mi hija estaba muy contenta mirando todo y sin perder detalle. Se acercaba la noche y la hora de cenar: supongo que como todos los días decían que el plato era: corazón de niño, hígado de vieja y de postre flan de ojos.

Pude contener la risa


En la sala hubo una proyección en la que se contaba la historia de aquel lugar maldito,.. nos sirvieron bebidas palomitas y picoteo. primera tarde noche resuelta


Al día siguiente decían que venía lo mejor, yo pensé que sería la misma pantomima y poco más, pero pasando por el pasaje del terror me esposaron como para dejarme emparedado y tener una muerte agónica, me gustó la idea para que mi hija pasara un poco miedo, lo que no esperaba era ver cómo dos hombres de más de 30 años, se acercaban a mi hija y empezaban a tocarla primero su cara, sus brazos y piernas, ella parecía alegre. Uno de ellos empezó a besarla y ella respondía, mientras el otro le quito la camiseta y el sujetador para chupar bien sus pezones, además agarró la mano izquierda de mi hija y la llevó a su polla que se había sacado.


No podía creer lo que estaba viendo: dos tíos sobando a mi hija y yo sí poder hacer nada.


La cosa fue a peor, desnudaron del todo a mi hija, la imagen de verla con una polla gorda en la boca chorreando semen de sus labios, el otro metiendo y sacando dedos de su culo y su vagina, no podía ser verdad eso


Ya no eran ellos los que hacían nada, era mi hija la que los pajeaba, se las chupaba y se ponía a cabalgar al mismo tiempo que chupaba una de las dos pollas, se veía muy resuelta y sabiendo lo que hacía con una cara de felicidad enorme. Debo decir que me excitaba la escena de ver la así

Yo no aguantaba más, me quería morir de ver como se follaban a mi hija. La bañaron en leche.


Me asusté más aún porque en un momento mi hija había desaparecido y no sabía que podían haber hecho con ella.


En diez minutos mi hija volvió a aparecer y parecía que se había duchado y cambiado de ropa y yo volví a respirar. Mi hija se acercó a mí y sin hacer nada para liberarme me dijo que si lo había pasado bien y había disfrutado. Luego me habló de lo mal que lo había pasado mientras me estaba divorciando de su madre…entendi que había sido su pequeña venganza por lo mal que lo había pasado y como como se había sentido excluida cuando tanto su madre como yo solo pensábamos en tener la razón.


No tuve fuerzas para recriminar ni regañar a mi hija y no quiero pensar que le hará a mi ex, aunque un poco sí, me encantaría saberlo




jueves, 17 de agosto de 2023

Otra mamota nueva

 Parecía que había puesto un anuncio en Messenger, en Twitter, en Facebook o yo que sé pero venga tener avisos de mamotas para coger, vale en realidad no tantos, solo llevaba seis, me gustaba mucho eso porque eran mujeres que no me iban a exigir nada más allá de que cogiéramos con un poco de cariño.


Esta a diferencia de las anteriores que ya habían pasado los 50 hacía tiempo, tenía cuarenta y seis años y aún conservaba la lozanía y la jovialidad. Recibí un whatsapp suyo en el que me decía que había oído hablar de mí a una amiga y que por probar una vez no pasaba nada. Quedamos una vez en un café bar y me contó que llevaba siete años divorciada y sin pareja, qué tenía una hija de ocho años y no había querido meter hombres en su casa estando su niña pequeña por qué los hombres sois muy cabrones y no respetáis nada


También me dijo que tenían custodia compartida de la niña y que los próximos 15 días estaban con el padre y a ella le apetecía divertirse.

Yo le dije que no se fuese a pensar que yo me dedicaba a coger con mujeres maduras, evite decir viejas porque ella no lo era.


Los dos quedamos contentos con nuestro encuentro y me dijo que ya me llamaría si yo seguía interesado.

Tres días después se puso en contacto conmigo, diciéndome dónde vivía y una hora a la que ir, las cuatro de la tarde. Dude entre llevar unas flores una botella de vino o unos bombones, qué fue lo que elegí al final.


Faltaban cinco minutos de la hora fijada cuando llamé a su puerta y abriendo solo un poco me hizo pasar rápido porque llevaba un vestido que no escondía nada. Ya dentro vi bien que su vestido no ocultaba nada era bastante transparente. Nos saludamos y nos pusimos a hablar pero muy poco tiempo


: No habrás venido a contarme tu vida verdad?


No, es que no quería ser tan directo


Sí estamos aquí es para coger no para que veas como tengo amueblada la casa.


Como ya he dicho su vestido no escondía nada, dejaba ver casi como por un cristal un poco cubierto de vapor, sus pezones y aureolas, como también se veía la oscuridad en su pubis. Tenía una cara agradable y un pelo negro y largo, figura contorneada.


No estábamos allí para perder el tiempo y empezamos a besarnos, y vamos acariciándonos y además de que saltaba a la vista, noté que que aunque no era tan voluptuosa de pecho como otras de las mamotas con las que había cogido, sus pechos eran más que suficientes para satisfacer a un chico como yo.


Habíamos estado frente a frente y le pedí que se diese media vuelta para agarrar sus pechos desde atrás y apretarlos mientras chupaba su cuello y también iba notando como mi verga crecía cerca de su culo.


Nos desnudamos y acompañamos con la lengua el movimiento de quitar la ropa. Yo solo la tenía un poco dura y ella me dijo de ir a la cama para continuar. Ya en la cama ella me la empezó a jalar y yo empecé a jugar con el pelo de su concha, de repente se la medio en la boca toda y yo me puse a buscar entre su vulva su entrada y a meter un par de dedos al tiempo que mi dedo pulgar y mi lengua jugaban con su clítoris.


Aunque yo había ido ya con una paja hecha en casa para no acabar rápido, solo tarde unos 20 segundos más que ella en venirme por primera vez


Me dabalbo mientras yo sujetaba sus pechos con los pezones bien duros, lo hicimos también a cuatro patas, se le notaba todo el tiempo que llevaba sin coger por las ansias que tenía.


Por último, ese día, nos pusimos depie ella inclinada hacia adelante obedeciéndome la entrada a su concha y su culo y primero abrazando y apretando sus pechos, ella me la agarró y la puso en la entrada la medio un poco más de la punta y me dio un pequeño azote en el culo como si estuviera animando a un ccaballo.Tenía vía libre para entrar y salir de sus dos agujeros animado por sus jadeos cada vez que la metia, llegado un punto le pregunté si la podía agarrar del pelo, se levantó un poco y mirándome riendo me dijo: has gozado de mis pechos estás cogiendo mi culo y mi concha y me preguntas que si puedes agarrar mi pelo


No digas tonterías agárralo y no pares de cogerme


Seguimos un buen rato en el que nos vinimos los dos y luego con cara de tonto yo, seguro, volví a comer su concha porque me había encantado sus gemidos la primera vez que lo había hecho





miércoles, 16 de agosto de 2023

Bodeguita

 Me enrolle con la amiga de mi mujer, había una tensión sexual entre nosotros desde que nos conocimos, claro es que mi mujer y yo nos queremos y no tenemos problema con el sexo pero son cosas que pasan y al contrario de lo que se podía esperar qué es que en verano con menos ropa surjan las pasiones, todo sucedió en febrero con muy bajas temperaturas, una noche que nos había invitado a cenar para celebrar que había conseguido un ascenso en el trabajo.


Estábamos en su casa que tenía una pequeña bodega donde guardaba muchas botellas de vino. Nos habíamos bebido ya dos botellas de vino entre su chico ella mi mujer y yo, cómo estábamos de fiesta pensamos que haría falta más vino y como yo soy un poco entendido en vinos, dijeron que yo podía bajar y seleccionar la próxima botella.


Fui con la amiga de mi mujer y después de inspeccionar todo lo que había allí, le sugerí un par de botellas que eran interesantes. Supongo que es típico de hombres mirar los cuerpos de las mujeres y ya cuando íbamos bajando a la bodega no pude evitar mirar como movía el culo, también es verdad que aunque no muy grande ella tenía un pecho generoso y bueno ya podéis imaginar cómo funciona la cabeza de un hombre. Se me ocurrió comentar: anda que lo bien que lo habéis tenido que pasar aquí en la bodega tú chico y tú


Qué? 

Nada nada, qué debo tener una mente muy sucia pero que yo aquí con mi mujer nos lo pasaríamos muy bien


Ja ja mi chico no gusta de bajar aquí, dice que está oscuro que hay muchos bichos y de la arañas y eso no le gusta nada


Pero arriba tenéis duchas y todo eso


Usted pero él no quiere bajar


Qué pena, Dios da dientes a quien no tiene pan


Ja ja, creo que es al revés, Dios da an a quien no tiene dientes


Bueno pero me has entendido


Sí ya que estamos que harías tú con el pan y los dientes que hay aquí abajo


Mmmm me estás poniendo a prueba?


No solo es porque eso que has dicho del PAN y los dientes me ha dado que pensar


Pues no sé qué te parece si empiezo acariciando tus pechos mientras beso tu boca y tu cuello, me acerco bien a ti para que notes como me va creciendo la polla y quieras sacarmela para jugar con ella con tus manos con tu boca o poniéndola entre tus tetas… luego te majo la falda o la subo sobre tu abdomen y me pongo a beber entre los pliegues de tu coño y después teniendo en cuenta que nos están esperando para subir el vino, echar un polvo rápido los dos de pie y tú apoyada contra las botellas. Serían dos orgasmos buscando botellas jeje


Y sí te digo que si? Ja ja me he puesto cachonda pensando en todo lo que podríamos hacer en la bodega.


Como he dicho nos están esperando


No seas cagón, eso sí no nos vamos a desnudar, solo lo preciso, bajar o subir un poco mi falda y abrir tu bragueta.


No sabía si de verdad quería hacer eso, pero cuántas ocasiones iba a tener de follar con ella allí en su bodega?


Más o menos lo hicimos como yo había dicho antes, añadiendo que también probé su culo, en total veinte hasta que llegamos con las botellas


Nos dijeron que si habíamos tenido que recolectar la uva y hacer el vino nosotros mismos porque habíamos tardado mucho


Dijimos que había tantos vinos allí que yo había tardado mucho en elegir





martes, 15 de agosto de 2023

Una buena estudiante



Hola voy a contar una historia de mis tiempos de estudiante en la universidad. No era una estudiante brillante pero iba sacando los estudios bien sin problema, pero claro siempre hay alguna asignatura que se atraganta y no hay forma de aprobar, en mi caso esa asignatura me había costado ya tres suspensos y mira que yo estudiaba, estudiaba mucho pero era entrar al examen y me quedaba en blanco.


Estaba muy cansada de que me pasara eso y me propuse no volver a suspender para lo cual seguí el consejo de un compañero de intentar ir a todas las tutorías posibles para que el profesor viera que estaban muy interesada y que trabajaba la asignatura, aunque me resultara un poco odioso estar metida en el despacho del profesor, que era un hombre de cincuenta y pico años pero que viéndolo bien, para esa edad y lo poco que se supone que se mueve un profesor, no estaba muy mal.


Empecé a ir a las tutorías y el me reconoció y dijo que sí tenía algún problema con la asignatura por qué llevaba ya unos suspensos. Me alegro ver que no era un monstruo y le expliqué que estudiaba mucho pero que cuando entraba al examen me quedaba en blanco. Continúe yendo a las tutorías porque me sentía cómoda y pensaba que tendría muy buen resultado para mi siguiente examen. Un día, martes creo recordar, fui a tutoría con un pantalón vaquero ajustado y una blusa ancha, sin ningún objetivo premeditado, eran principios de mayo y ya hacía calor. Le pedí al profesor que me explicara unas cosas que yo no acababa de comprender y muy amable se acercó a mí para aclarar esas cosas, yo estaba sentada y él depie mientras me hablaba, y puedo jurar que no fue intencionado pero por mi escote se podían ver un poco mis tetas y él se había quedado con los ojos fijos en mi pecho. En este momento me hice la ignorante de lo que estaba pasando.


La semana siguiente fui a tutoría con el mismo pantalón y top arriba, nada fuera de lo normal pero antes de entrar fui al baño y me quite el sujetador para darle una alegría a sus ojos y ver cómo como cada día muy amable empezó a aclarar mis dudas y yo pensando en cómo sería follar con el lo imaginé aclarandome conceptos mientras me la metía y mis pezones se pusieron un poco duros, está claro que él se dio cuenta, pero era demasiado correcto y no creo que se planteará ningún idilio con una alumna en su despacho.


Yo estaba muy caliente y de forma inconsciente le agarre una mano y la puse mi teta izquierda, no hubo palabras solo mi otra mano fue a su bragueta y noté que ya la tenía bastante dura, me quite el top y sus ojos crecieron al ver mis mis tetitas que no eran demasiado grandes pero estaban muy bien colocadas y aunque mis pezones eran pequeños estaba muy apetecible para los hombres.

Me sujeto los pechos para jugar con mis pezones y sus dedos pulgares yo cada vez estaba más caliente y dirigí mis manos a su entrepierna, con su ayuda se la saqué, una polla que no estaba nada mal de tamaño, le iba a regalar una paja pero pensé que mejor una chupada metiéndola casi hasta el fondo de mi garganta y sacándola para dar un frote de lengua en su capullo, una y otra vez mientras jugaba con sus pelotillas.


Se corrió entre mi boca y mi tetas y cuando pudo volvió a comer mis tetas y yo me bajé el pantalón quedando solo con unas braguitas blancas que ya estaban empapadas con mis flujos, de un tirón me las bajo y empezó a beber de mi vulva mientras sus dedos que aunque no eran trabajados eran bastante gordos, me entraban y salían libremente haciéndome sentir placer. Después tendida en una especie de sofá y sin vergüenza por parte de ninguno de los dos, no éramos profesor y alumna, éramos una mujer y un hombre entregados a los placeres de la carne saciando necesidades animales


Cuando acabamos otro compañero llegó para dar su tutoría pero el profesor le dijo que viniese mañana por qué este día no podía, no sé que pensaría mi compañero al verme salir del despacho sin sujetador y cómco pude comprobar cuando fui al baño, con el pelo muy alborotado.


Segui yendo a tutorías aunque ya si pensábamos algún encuentro especial lo hacíamos en mí piso para evitar cualquier visita inoportuna al despacho.


Por fin pude hacer el examen sin quedarme en blanco y saqué un 7,5






lunes, 14 de agosto de 2023

Vacaciones con dieciocho años

 

No sabía que tener 18 años daban esos placeres...

-Donde tenemos que dejarte? Dijo el conductor.


-En la estación está bien, gracias!


Íbamos los dos viejunis y yo en la parte delantera, yo acurrucada en el asiento central de la furgoneta escuchando su conversación. Una conversación poco Interesante para mi, ya que hablaban de trabajo...


Yo mientras tanto, no podía parar de recordar lo que había sucedido. Y a la vez eso provocaba una liguera sonrisa malèvola en mi boca. Esos dos individuos, los quales no conocía ni su nombre, tenían un souvenir fantàstico de lo que acababa de suceder. Una foto en la que se me contemplava completamente desnuda, estirada en la cama de la furgoneta i penetrada hasta el fondo, era maravillosa. Si, esos dos hombres me acababan de follar en la furgoneta. Un martes qça primera hora de la mañana. A finales de un julio tórrido.


Queréis que os lo cuente?


Estaba de vacaciones en el apartamento, mis padres todavía trabajaban pero de lunes por la mañana a jueves tarde trabajaban. El jueves subían de nuevo a teletrabajar. Pero yo y mi abuela nos quedábamos toda la semana. Playa, buena comida de mi abuela, siesta, libros, series playa, ese era mi resumen semanal durante las últimas 2 semanas. Lo único que había variado es que iba un poco más caxonda de lo normal. Lo asimilé a mi período habitual mensual. Cuándo este de acerca mi dedos cogen agujetas y las esquinas de los muebles se humedecen. Si soy así.


Un lunes por la mañana mi abuela no se encontraba bien y tuve que salir a la farmacia. Los lunes madrugamos para despedir a mis padres e ir a comprar una vez habíamos desayunado. Vestido playero, solamente con ropa interior inferior y mis Havaianas. Salí del piso monedero en mano puro estilo abuela. Solamente tenía que caminar 4 calles para llegar a la farmacia. Cuando en la segunda calle una furgoneta me arrolló. Fue más mi torpeza con las sandalias que la furgoneta, pero al empujarme ligeramente y la sandalias me caí. Sin tiempo a saber que había pasado dos hombres me ayudaban a levantarme. Sentí unas manos fuertes que me agarraban de mi brazo para levantarme. Vi el brazo brilla del sudor provacado por el calor infernal que habitava esos dias. Esa sensación de calor que ese cuerpo desprendía, me hizo querer lamer cada centimetro de sudor que emanaba.


+Disculpa chiquilla. Estas. Bien? Joder lo siento.


Yo contestaba estar bien pero me preocupaba recoger las monedas que estaban por el suelo. Una vez todo volvia a estar en la normalidad. Siguieron insistiendo en mi estado. Una de las sandalias se había roto. El hombre me dijo que las quería pagar, eran muy insistentes, queriendo disculparse por lo sucedido.


Así que sacaron dinero del bolsillo y me dieron 50€.


Se que esto no paga el mal trago, pero te compras unas sandalias nuevas. Quieres que llamemos a tus padres? A la policía? A la ambulancia?


Estoy bien de verdad. Gracias.


Si encima nos da las gracias que maja.


Mira somos trabajadores de este sitio. Señalando una contenedor de runa. Cualquier cosa que tengas me dices ok?


Dejame la sandalia que te la intento arreglar al menos para llegar a casa. Nos acercamos a la puerta corredera de la furgoneta y me hicieron sentar y todo. Me fue bien, ya que me temblaban las piernas.


Que chula.


Te gustan las furgonetas?


Síii, molan mucho.


Esto de aquí se hace cama,... Me explico alguna cosa, pero yo no podía concentrarme. Mis piernas estaban temblorosas.


Mira toma una de mis tarjetas. Aquí esta el teléfono. Si te doliera algo, lo que sea me llamáis y lo solucionamos, ok?


Vale perfecto, gracias!


Nos despedimos muy amablemente y yo seguí caminando con una sandàlia reparada con una brida y un dolor leve en el costado.


Al regresar a casa, no tardé en levantar mi vestido y comprobar que el golpe no era nada. Pero tenia pinta de ponerse feo. El dia pasó como ya he explicado antes. Playa, buena comida de mi abuela, siesta, libros, series playa... Al llegar la noche llegaba mi parte mas íntima. Donde ya en el sofá con mi abuela dormida o en la cama acurrucada en las sábanas leía una novela erótica a las que estaba enganchada. Después de elevar mi temperatura 🌡️ a niveles insostenibles mi mente empezaba a trasgiversar. Tanto como para pensar en el hombre que me había atropellado esa mañana y en la tarjeta que me habia dado. Fui a buscar la tarjeta al monedero de mi abuela con el màximo sigilo posible y marcar el teléfono en mi móvil.


Mi cabeza daba vueltas como contactar con él para poder aliviar mi deseo de alguna manera. Esa diferencia de edad siempre me había vuelto muy loca. Así que cuando tuve la idea perfecta me puse bien sexy de nuevo con el mismo vestido del atropello. Levanté este hasta el sin fin y fotografié mi pierna amoratada. Enviando la foto y adjuntando el siguiente texto:


Quizá debería ir al médico, pero no se como decírselo a mis padres. No es muy normal que te atropellen cada dia. :)


Me sorprendió el tiempo de su respuesta pero también la contestación.


Que no se lo has dicho a tus padres? Pero estás loca?


Vaya moratón, mil disculpas de nuevo. Ese paso de zebra es criminal. No se ve nada.


Oie guapa, de verdad si necesitas lo que sea lo haré, ok.


Estamos en contacto.


Saludos.


Un mensaje muy correcto, muy simpático, muy agradable. Me hizo querer contestar y seguir hablando de con él.


No te preocupes, de verdad. Asi mi carne se endurece que lo necesita. Jejeje


Me ha gustado eso de " estamos en contacto ". Tomo tu palabra.


Dureza? Eso solo necesita mimos.


De verdad si necesitas mutua, o que hable con tus padres. Sin problema.


Mimos? Vaya, no tengo a nadie para ello. Necesito verte de nuevo...


Verme de nuevo. Hombre estoy casado y con hijos, pero puedo hacerte un masaje leve. Jajaja


No soy celosa. Jijiji el masaje...Con crema?


Claro. Si hace falta...en la furgoneta nadie sabe lo que pasa dentro y tiene un colchón muy cómodo.


Así? Que tiene de cómodo?


Se hace una cama para poder estirarte y masajear suavemente y tranquilamente.


Oohhhh! Que chulada. Mr encantan esas furgonetas. Pues... Quizá mañana lo necesite. Pq me duele mucho...


En serio? Te estás quedando conmigo?


No. Quiero verte de nuevo!


Bueno, no quiero sorpresas raras. No estoy para tonterías. Te vi muy bonita, la verdad.


Gracias, yo tampoco quiero sorpresas. Solo te transmito lo que me apetece.


Bueno vete a dormir y si eso mañana cuando veas la luz, me dices ok? Yo encantado de poder ver de nuevo a una jovencita como tú. Besos y buenas noches.


Quieres seguir hablando conmigo? Jiji q bien. Buenas noches, besitos!


(Y adjunté una foto en mi pijama veraniego. Unas braguitas y una camiseta de tirantes muy sexy)


Mañana hablamos! Besos.


Dormí fatal esa noche, mira que me habia masturbado y todo. Pero no hubo manera de poder dormir. Vuelta a un lado vuelta al otro!


Cuando escuché a mi abuela dar vueltas por casa, ya sabéis que que la gente mayor duerme mucho menos que la mayoría. Decidí levantarme también. Mi abuela solo verme comentó.


Que cara hija mia. Ni que hubieras dormido con un desconocido.


Eso me hizo pensar de nuevo en mi nuevo desconocido. Y fui rápidamente a por el teléfono a ver si me había hablado él. Como una enamorada en los primeros días. Pero nada, no había rastro de mensaje. Empecé a hablar conmigo misma en esa locura personal.


Estás loca, como alguien que te ha atropellado y sin más te va a escribir. Nada nada... entonces di la vuelta al móvil vi el billete de 50€ en la funda. Esos que me habían dado para comprar unas sandalias nuevas. Volviendo a pensar en que eso era una señal para escribir de nuevo!


Buenos días! Añadí una cara sonriente. Fui clara y concisa.


Dejé el móvil y me fui a desayunar. Estaba ansiosa quería seguir hablando con ese hombre, ¿que me pasava?


Acabamos de desayunar con mi abuela y volví a mi habitación para comprobar el teléfono.


Hola guapísima! Como va el moratón?


Entendí que queria una muestra. Fui al baño y al mirarme vi una cosa exagerada. Un Moratón de otro nivel!! Lo fotografié pero con una pose un poco mas sexy de lo normal. Ya que iba en braguitas y una camiseta de tirantes finos marcando mis pechos.


Sabes, Estoy cerca de tu atropello!


Oh! Que mono. Y te acuerdas de mi?


Pues si. No he podido evitar el pensamiento de verte allí estirada con el vestido a medio subir...Quieres que nos veamos?


Me puse a temblar. Y contesté...


Si. Claro! Pero solos y en tu furgoneta.


Cuando te va bien?


En 20'...?


Me costó escribir el mensaje mi cabeza no era consciente de lo que se venía pero mi cuerpo ya me preparaba.


Te pasamos a buscar!


Pasamos? No contesté en ese momento, pero desayuné lo más mínimo. Mi cuerpo no era capaz de recibir nada.


Cuando ya estaba lista, de nuevo con un vestido veraniego, el bikini y unas zapatillas de una marca muy reconocida, estás por si había que salir corriendo. Bajaba las escaleras mientras concretaba la recogida. Fue en la misma esquina de mi apartamento. Rápida como una entrega de Amazon, como una operación pensada y planificada. Seguramente sí lo hubiéramos planificado más no hubiera salido tan bien.


Hola. Dije tímidamente mientras me subía a la furgoneta.


Hombre la amoratada. Dijo el conductor, con el que había estado hablando. Los dos rieron tras el comentario. Si, estaban los mismos en la parte delantera de la furgoneta. Una furgoneta de tres plazas delanteras.


Y que haces por aquí? Dijo el copiloto.


Y tu? Contesté...


Bueno yo estaba en el ajo también. Si hay que hacer masaje yo también quiero!


Pues a eso vengo...a por mi masaje!


A ver el morado?


Me incliné hacia la puerta y levanté mi vestido sin miedo ninguno. Enseñando el moratón y también mi ropa interior.


Buuffff...


Duele?


Si lo tocas si!


Joder. Que feo se está poniendo.


Vengo para poner remedio y que no me quede un trauma.


Bueno, eso no sé si será del todo posible...


Jajajajaja


Rieron los dos tras el comentario.


Qué pasa?


Pues chiquilla que si mandas fotos como las mandas y luego buscas quedar con unos hombres casados. Qué quieres que te quede?


Pues eso no quiero un trauma del atropello, quiero mejorar vuestro recuerdo.


Eso suena interesante... quieres ir empezando?


El copiloto llevaba la voz cantante mientras que el conductor parecía saber bien donde íbamos.


Vale... contesté mirándoles una vez a cada uno.


Me puse en el borde del asiento después de no ver respuesta por su parte. Entonces el copiloto se sacó el cinturón y lo volvió a atar por detrás de su espalda para callar la alarma. Seguidamente bajó su pantalón corto de algodón quedándose en calzoncillos. Yo alargué mi mano y acaricié su paquete.


Bien nena bien.


Hice por bajarle el calzoncillo, pero sin su ayuda era imposible. Así que finalmente conseguí dejar su polla libre. Estaba flácida pero eso no me desanimó. La agarré y me incliné para llevarla a mi boca. Sentí más su mano en mi cabeza que su polla en mi boca. Era pequeña pero fue como un vaso de agua en un momento de sed. Ese alivio recorrió todo mi cuerpo activandome por completo. En pocos segundos esa polla tenía la forma que yo más tenía en mi mente. Se aguantaba recta y se marcaban las venas. Podía meterla entera en mi boca, era más fácil que los helados de hielo que comprábamos en casa ya no hablo de las verduras del mercado. Empecé a sentir también sus manos acariciar mi cuerpo. Pero no le daba importancia, prefería estar allí amorrada.


Joder la niña. Dijo el conductor.


Ya ves, voy a parara aquí mismo.


Sisi, porque me va a hacer correr y quiero más. Parloteaba el beneficiario de mi boca entre suspiros.


Se detuvo la furgoneta y yo intenté levantar mi cabeza pero una mano lo impidió. Así que seguí chupando su polla. A los pocos segundos la puerta de mi lado se abrió y ese hombre que tanto había deseado por fin me tocó. Lo hizo para poner mis rodillas en el asiento y acomodarme para...(Ñammmm) Sentí los dientes de ese hombre clavarse en mi nalga. Buaaaahhh, es perfecto! (Ñam) otro mordisco, joder que maravilla..(ñam, ñam)


Reconozco que sacó una sonrisa en mi boca. Mi vestido estaba ya en mi cintura y mi tanga se instaló a un lado. Mi coño era lamido como una vaca mientras lame la sal. Que locura más placentera joder fue sentir su cara aplastada en mi coño y correrme!!


Tss tss, vamos a la parte trasera. Dijo el conductor.


Me reincorporé y sin ver nada más que sexo y placer me metí por la puerta corredera. Directamente a la cama que ya estaba preparada previamente. Una vez se cerró la puerta, no tardaron en lanzarse, literalmente, sobre mi.


Mi vestido desapareció en un instante y mi cuerpo era manoseado mientras mi cuerpo resposaba estirado en la cama.


Joder que carne más apetitosa.


Me vais a comer?


Y a follar niña!


El conductor se puso a mis pies y tras abrir mis piernas y acercarse a mi. Su polla me penetró. Sus brazos sostenían mis piernas, mis carnes se movían al són de sus pollazos. Pero yo solo chupaba polla. No podia hacer nada más, ya que me tenía bloqueada con sus manos.


La intensidad de la follada disminuyó, y ahora solamente sostenía una de mis piernas entre sus brazos. En la otra mano tenía el móvil enfocándome mientras sacaba y metía su polla lentamente. Pude verlo gracias a que el copiloto se retiró para no salir en la foto. Entonces la polla del copiloto volvió golpeándome la cara y escupiendo semen. Era un semen muy espeso. No tenia mucha experiencia en semen, però era como una crema pastelera lo prometo. Quedó pegado por toda mi cara y pelo. Yo solo podía observar como el conductor volvía a las embestidas grabando con el teléfono. Estaba a punto de llegar al éxtasis y quería ver cómo me follaba.


Llegamos a la par, lo que su semen más liquido que el anterior se esparció por mi barriga. Quedé exhausta estirada durante unos segundos en esa cama mugrienta. Mientras ellos se colocaban la ropa. Yo dudando que hacer con todo ese semen repartido por mi cuerpo... Me incorporé mirándoles.


Cuidado cuidado que lo mancharas

 todo.


Me tiró una camiseta vieja que usaban como trapo y me limpié lo más superficial. Para poder poner mi vestido seguidamente. Nos sentamos en la parte delantera nuevamente y me preguntaron:


Donde tenemos que dejarte?




domingo, 13 de agosto de 2023

Me tocan una teta en el bus... y me gustó

 

Seamos sinceras, por mucho que sea repudiable el hecho que te manoseen en un espacio público no podemos negar que en algunas circunstancias y dependiendo de nuestra calentura es que puede resultar una experiencia muy excitante. Claro, siempre y cuando quien te manosee no posea niveles muy altos de perversión, de lo contrario sería un alto riesgo dejarse manosear por placer... consideremos que muchas quedan petrificadas por el impacto y lo invasivo de la situación, pero existimos otras que muy secretamente disfrutamos de una mano intrusa de un desconocido que nos acaricie nuestro cuerpo, parte de morbo existe ahí. Es cierto, creo que hay contradicciones en la concepción del abuso patriarcal, como todo en la vida, nosotros mismos siempre vivimos en contradicción, lo digo porque he analizado mucho este tema ya que me considero abierta de mente y en muchos sentidos bastante feminista o anti patriarcal. El fundamento que doy no es un estudio cuantitativo del tema, sólo me baso en mis dos mejores amigas que, al igual que yo, se consideran feministas, una de ella es activista incluso. Ellas dos están en contra de la violencia patriarcal, pero yo considero que, al fantasear con el hecho de ser violadas en un espacio público, ambas tienen una fantasía más o menos similar, caen en una inevitable contradicción con el pensamiento de abuso patriarcal, a menos que sea consentido, por supuesto, y consecuentemente quitándole el factor sorpresa de la fantasía.

El hecho es que una vez iba en un bus interprovincial a una zona rural del campo de Chile, cercano a la costa por Santa Cruz, era un viaje que rutinariamente hacía para visitar a mi abuela materna. Siempre me ha gustado ir en el lado de la ventana ya que el paisaje me distrae de la rutinaria ciudad de Santiago. Pero eta vez iba dormitando, en eso estaba cuando me sorprendió una mano colándose entre el espacio de la ventana y el asiento, abriéndose paso a tocarme en la zona axilar, es decir entre mi brazo y mi teta izquierda. 

Aquello me asustó bastante, luego miré de reojo aquella mano, no era una mano marcadamente masculina, sí se le notaban algunas venas pero sus dedos eran delgados, sus uñas limpias, aparentemente no era el típico viejo verde tosco desesperado por aprovecharse de cualquier situación para satisfacer sus bajos impulsos, bueno en realidad sí era lo útimo, porque realizar aquel acto desde ya es deleznable o al menos refleja un claro trastorno más o menos complicado... para ser sincera creo que yo también al excitarme con un acto así de reprochable, pero en el fondo creo que cualquier persona que se aproxime acariciando tus zonas erógenas de forma adecuada para provocarte se excitaría como yo, o no? En fin, reparé en que no era un viejo verde quien estaba situado en el asiento de atrás, más bien y por lo que recordaba cuando me subí al bus y me dirigí a mi asiento 35 me había percatado de un joven con polerón con capucha, no distinguí su cara pero fue suficiente para ahora estar segura que no era un hombre muy mayor, probablemente habrá tenido mi edad, 30, 35, por ahí.

Comencé a hacerme la dormida y sentía cómo de vez en cuando su brazo daba intentos no con poco esfuerzo de cupir por el escaso espacio que quedaba entre el borde del asiento y la ventana, quizás habrían no más de 10 cm. y ese brazo delgado se abria paso lentamente ya rozando por el lateral de mi teta izquierda provocándome sensaciones nunca antes sentidas.

Me preocupé, antes de continuar haciéndome la dormida para que mi acechador no desistiera de la idea de sentir mis pechos, de mirar a través del pasillo los dos asientos ubicados al lado derecho, en estos sólo había un niño distraído con un dispositivo portátil, aparentemente un videojuego. acomodé mi cabeza de tal manera que con sólo abrir un poco los ojos mi visual diera al pasillo por delante con un ángulo levemente elevado para poder ver si algún pasajero se dirigía al baño del bus o si por alguna razón el auxiliar de este pudiese ir atrás de la máquina a cobrar algún pasaje que pudiese quedar pendiente.

habían pasado aproximadamente una media hora y ya podía visualizar al mirar a mi hombro izquierdo, cómo esa mano prácticamente me tenía sujetada una teta con su palma de la mano y desde atrás... y seguía esforzándose para aventarla más de forma que buscaba peligrosamente sentir mi pezón con la yema de sus dedos. Lastimosamente yo andaba con un sostén poco glamuroso que no era lo suficientemente delgado como para dejar disponible mi hermoso pezón al tacto por encima de mi polera.

Estaba tan caliente que disimuladamente posé mi mano derecha en medio de mis muslos sintiendo el calor inmenso que se producía en mi entrepierna. Mientras mi brazo derecho estaba acomodado con el codo apoyado en la ventana, de tal forma que quedaba mi zona axilar abierta para hacerle un expedito lugar al brazo invasor que pretendía sentir mi teta a destajo.

Tan pronto como llegaron la punta de sus dedos a mi pezón es que levemente me sobresalté por la sensación y me giré un poco más hacia la ventana para facilitarle un poco el tanteo de mi teta y por qué no decirlo, para sentir más esa mano en mi cuerpo ya que a esa altura yo estaba nublada, no reaccionaba, estaba paralizada por la mezcla entre el miedo y el placer.

No estoy segura de si él habrá notado mi pezón, pero lo que sí estoy seguro es que sintió que le permití tocarme porque de lo contrario no se habría sentido a sus anchas agarrando prácticamente uno de mis pechos, que sin ser exuberantes son lo suficientemente grande como para llenar una mano entera, que era lo que esta vez visualizaba con un extraño y enfermizo erotismo. Pasaron unos 10 minutos más y rápidamente la mano desapareció de mi visual sin apenas rozarme para sacarla, lo que me llevó a pensar que el tipo era muy hábil y que probablemente yo no sería la primera de sus víctimas. El bus fue parando al llegar a San Fernando, lugar donde el jóven manos largas bajó sin apenas mirarme.

Quedé con mi vaginita impregnada de mis flujos, lo que me dio una idea, la cual eran muy comunes en mí. Busqué en mi cartera un libro que por esos días leía, acerca de Simone de Beauvoir, y debajo de este escondí mi mano izquierda para lentamente introducirlo por dentro de mi pantalón y mi mojada braguita para dar paso a una rica y suave paja. Incluso se me vinieron a la cabeza todas las veces que en el metro de Santiago había sido manoseada sin hacer nada por el miedo que todas tenemos a un escándalo público, pero escondiendo o renegándome hasta entonces que aquel acto tan reprochable pudiera ser causante de un oscuro y hasta ese momento desconocido placer.

Estaba muy entusiasmada de comentarle mi nuevo descubrimiento y experiencia a mi esposo Javier quien al igual que yo es muy abierto de mente, caliente como yo y dispuesto a descubrir los placeres sin cargarlos de prejuicios. Cuando llegó el día adecuado y me sentí en confianza de comentarle el suceso me sorprendió al proponerme una situación más o menos controlada, lo que caía en una fantasía más de tipo cornudo. ¡Vaya sorpresa mi esposo! pero aquello no hizo más que enamorarme y convencerme que tengo al mejor esposo que alguna mujer inusualmente caliente pudiera tener

La experiencia me sirvió para pensar en esa mano furtiva mientras me hago pajas a solas en casa





 

Esto ocurrio hace 5 años, yo soy divorciado, estube unos años solo de follador de la pradera, descubri el mundo liberal y swinguer, lo disfrute, pero conoce otra chica e inicie una nueva relacion, como ya he contado en algun otro relato, soy infiel por naturaleza, aunque le plantee el mundo liberal a mi pareja,no quiere saber nada de el.

Yo ahora vivo en casa de mi nueva pareja y vivimos en cuatro casas nosotros y los hermanos y la hermana  con sus respetivas parejas e hijos, que hicieron mis suegros en una parcela grande que tenian, los dos hermanos varones en los extremos y las dos mujeres en el medio, todas las casas dan al frente de la calle y a la huerta.

Cada uno tiene su trocito de huerta con su asador, jardin y piscina desmontables ( a veces comentan de hacer una piscina comunitaria, peroooo), yo cuando estaba separado tenia varias paginas para contactar con tias, y parejas para follar.

La mujer de mi cuñado mayor, habia unos años  que habia operado los pechos, se hizo 2 tatuajes pequeñitos y desde ese momento empezo hacer toplees(el resto de lla familia no le gustaba y yo encantado, cuando estaba solo en casa y andaba por el jardin y nos saludabamos  se las veia sin disimular, ya que veia que mi cuñado le molaba y ella se venian arriba), si estaba mi pareja o estaba por la zona el resto de parentesco ella se ponia una camiseta si andaba la peña por las huertas, me extrañaba que cuando era yo el que andaba por la huerta no se tapase tambien.

Resulta que un dia andando en una pagina de contactos liberales, me ponia que habia una pareja a menos de 500 metros, me pongo a ver sus fotos y videos ya aunque tenian las caras tapadas, reconoci primero a mi cuñado, sigo viendo todas fotos y analizo los videos, por los azulejos de los baños, pintura de la habitacion, y por el piso del salon, eran ellos, un perfil de amigos que llevaban dos veranos comiendo casi todos los domingos en su casa, que el resto de la familia no sabia de donde saliera esa amistad.

No podia contarselo a mi pareja, porque aunque ella sabia, que me movia por ese mundo, era una forma de evitarme una pequeña bronca, yo cambie un par de fotos que tenia de mi perfil que ellos poduisen asociar que era yo, cambie mi direcion en mi cuenta y deje de utilizar el GPS de la aplicacion para ver los usuarios mas cercanos, lo usaba de forma temporal para cuando queria iniciar alguna conversacion etc.

Les solicite la amistad en la pagina, me la aceptaron y charlabamos de vez en cuando, a veces cuando chateaba, era evidente que lo manejaba mi cuñado porque estaba mi cuñada en el jardin todtandose con las tetas al aire y me cuñado estaba dentro, un dia chateando con el me dice que esta muy jodido la espalda que se habia operado recientemente, no puede hacer esfuerzos, que su pareja era muy caliente y preferia pollas de carne que de silicona, ese año yo habia cambiado de empresa y tenia siempre de turno de malñana, igual que ellos, el reto de la familia trabajos a turno partido, algunos como mi pareja con horarios de tienda.

Llego el mes de mayo caluroso, y una tarde mi pareja se tubo que ir antes a unos recados y subi para el salon de arriba que tenia las vistas hacia su jardin, alli estaba mi cuñada torrandose en la hamaca solo con un minii tanga de bikini y una camiseta tapandose la cara, si venia mi suegro a su casa, si escuchaba abrir el portal de su huerta, pegaba un salto de la hamaca, ponia la camiseta y si le daba tuempo entraba para el interior de la casa.

Es un gesto que me llamo la atencion el primer dia que obserbe ese detalle, yo me sentaba en el mueble, la observaba y un dia para que se diese cuenta que la estaba viendo ya se fuera mi pareja levante un poco la persiana, ella sabia que estaba solo en casa, y en vez de taparse no, se empezo a untar tosde crema solar, se recreo, y mientras yo chateando con su marido, contandome el anecdotas y yo a el, en esas me conto, que a ellos le mola que la vean, pero que viven eun pueblo pequeño y que los vecinos y familia no entienden eso, el muy hijo puta, me cuenta que tienen mas que hablado , que les mola ver al cuñado como la ve, porque el tio no disimula ( dicho cuñado soy yo) que ese verano han descubierto que cuando se va su hermana a trabajar el tio que levanta la persiana y se lo pasa pipa con ella, que desde la habitacion donde esta el con el ordenador ve como su mujer calienta al cuñado..... y se lo pasan pipa, que les gustaria que se diese la ocasion de provocarlo tanto que haber si el tio tenia huevos de follarla o el tio se quedaba con las pajas a traves de la ventana del salon.

La situacion empezaba a ser la ostia, mi mujer me preguntaba que me pasaba ultimamente, que queria follar todas las noches, que ya me llegaba hacer pesado, ironicamente me decia si mis amigitas no me sacaban bien la leche, con unas y con otras me hice otro perfil en dicha pagina pa ir mas descarado y sin esconderme que era yo, mucha informacion la tenia, ahora tambien queria ver si era verdad, o era una manera de hablar por el chat con personas que no conoces y cres que nuca conoceras, en algun momento en el perfil viejo planteabamos de conocernos tomar unas cañas y jugar un dia hacer Dogging.

Mi cuñada sin ser un bellezon tenia un cuerpo bonito, y cada dia ponia mas carne en el asador, yo aveces me ponia pegado a la ventana y se untaba de aceite, se ponia boca abajo y hacia de la braga del biquini como si fuese un tanga lo metia entre sus nalgas, si se volvia girar y se obaba los pechos, ya que ellos querian jugar yo no me podia acobardar y esconderme, mi pareja se iba a ala 4:30 a trabajar ella salia a las 4:35 a tomar el sol, las conversaciones con mi cuñado con los dos perfiles, cada dia iban mas subidas de tono, en esto hay que clebrar en el mes de Agosto una cena familiar en el jardin de mi otro cuñado, en la cena coincidimos enfrente los cuatro, y cuando era en esas celebraciones ellos eran siempre invitados(porque los otros tambien estabamos invitados y nos echabamos una mano unos a los otros), nunca se levantaban a hechar una mano, eran los guapos de la familia.

Esa noche en concreto , se levanto mi pareja y otros cuñados y yo segui conversando con ellos, y ella saco varios temas que no venian a cuento, queria entra en juego erotico, en una de esas le metio la mano en la polla a mi cuñado, el se la saco y le dijo que no era el momento ni el lugar, ya que ella queria jugar yo tambien le dije a mi cuñado, ell puede.....jjjj el lugar es perfeto.... hay ahi una piscina para enfriar, si se esta muy caliente, y mi cuñado me entro al trapo me dice que ultimamente, debia ser el principio de la menopausia que andaba mas caliente que una caldera de vapor.

Estabamos como un poco apartados del grupo los tres, en una de esas mi pareja sirviendole el segundo plato, le lanza una indirecta que logico no pillase y es muy inocente para esas cosas, y mi cuñada dice Luis, Maria no sabe, no sabe....

Mi pareja ya media mosqueada, se vuelve a sentar, ellos cambian la conversacion, ya no me calentaban estando presente mi chica, aprovecho para ir al baño entrar en la aplicacion, e escribirle desde el perfil nuevo ami cuñado, le digo que dejen de vacilar, que llevo un calenton que no puedo con las pelotas, y quien va pagar las consecuencias es el coño de su hermana, yo declarado que era yo, ellos no se esconden cunado estaba en la mesa mi cuñado que estaba con el mobil se levanto, y me escribio, cuñado das la cara, le dije que no me habia escondido nunca, pero que no queria molestar a nadie, y que tenia alguna idea que me parecian ellos pero no lo sabia cierto hasta esa noche.

Me levante a fumar un cigarro y a contestarle, le digo, que alegraba ya de conocerlos en persona, que me gustaria seguir el juego, aunque no seria tan morboso ya descubiertos, pero que tendriamos otros alicientes, me dijo que como habia descubierto esa pagina, le dije que habia años ya tuviera otro perfil pero al empezar a slir con su hermana lo habia borrado y que en ese momeno habai hecho orto perfil, que tenia ganas de una canita al aire, y si pudiese ser con una pareja liberal ya seria la ostia.

Me pregunta si me atreveria a follar su mujer, le dije que si estaba muy cachonda, y mucho mas desde que tenia las tetas nuevas, se echo unas risas y me pregunto si me atreveria hacerlo con el delante, ya que tienen un pacto, que siempre juntos, entonces ya me abro yo un poco mas, le digo que tengo bastante experiencia, aunque ahora desde que estavba con su hermana me habia retirado y con ello un poco oxidado.

Se rie y me dice que si perder el oxido lo podemos quitar el lunes cuando su hermana vaya a trabajar. eta conversacion a rotos por el chat de la pagina a ratos, en esto me levanto a fumar se acerca el, conversamos, me dice que hacia un mes que desconfiaba que era yo, pero no tenia la ciencia cierta, le dije que su hermana no sabia nada, le comente que ya el lo sabia que la familia no le mola que su mujer hiciese topleps  en la huerta que tienen miedo que le pueda dar el frio.....jjjjjj que a mi me encanta, verla que disfruto mogollon.

Me dijo pues si disfrutas tanto lunes al marchar mi hermana atrabajar por la tarde te invitamos a un cafe y tu pones la leche, iva ser un fin de semana eterno, aun era viernes a la noche....jjjjjjjjjj

Luego se acerco mi cuñada, y le dijo te presento AMANTEGALLEGO que te habia comentado, nos reimos los tres luego se acercaron mas cuñados y preguntaban de que eran esas risas, mi cuñado para salir el paso comento una anecdota, pero mi chica anadaba un poco rebotada, porque le etaba haciendo mas caso esa noche a mis cuñados que a ella.

Despues en cama se le paso el berrinche, la calente,,, y cuando ya estabamos los dos supercalientes le dije que se pusiese a cuatro patas y la folle pensando en mi cuñada, que aunque es como 8 años mayor que nosotros esta de vicio.

El sabado y el domingo me paso unas fotos mi cuñado  de mi cuñada pa calentarme y mi cuñada tambien imagenes de parejas en las que la mujer es HOTWIFE, y se ve al macho corneador como folla a la mujer en presencia del marido cornudo.

Yo les segia el juego e iba borrando para que no me pillasen ese materia en el tlf, lunes antes de que se va mi pareja a trabajar la llama el hermano para pedirle unas cosas y le pregunta por mi le dice que estoy con ella, le dice si me puede pasar el tlf, me pregunta por una herramienta y me dice si se la presto, le digo que si, entonces me invita a un cafe y que le lleve la herramienta.

Cuando se va mi chica, me dice que no me olvide de llevarle la herramienta a su hermano, e ironicamente me dice, a ver si tienes suerte y esta tu cuñada con las tetas al aire en el jardin y se las ves mas de cerca. Lo que no se imaginaba ella ni por asombro es oque iba pasar en menos de media hora.

Se fue, me llama mi cuñada si me atrevo o ya me arrepenti desde el viernes, le digo que en unos minutos, me dice que me esperan .... Les toca en la puerta de casa del jardin me abre mi cuñado, me sirve un cafe y aparece mi cuñada en el salon con la braguita del vikini y una camiseta, se acerca me da un pico y me echa la mano a la polla, yo ya tenia un empalme de caballo, y le dice a mi cuñado.... Cariño eeste viene a darlo todo, no hay que ponerlo duro, me levanto, me acerco a ella y empiezo a morrrearla y sacarle la camiseta para comerle las tetas de silicona, mi cuñado se sienta en el sofa y se empieza a machacar la polla.

Mi cuñada esta en celo, le sobo duo las tetas y el coño lo tiene encharcado, ella me aprieta la polla por encima del pantalon corto qye tenia puesto y nos acercamos a mi cuñado, mientras se besan, yo aprovecho para quitarle el el tanga del vikini y comerle el coño y el culo, ella empieza a gemir como una cerday mi cuñado a repetirlelo puta que es.....Que la va follar el cuñado por ser tan cerda.

Me voy poner un preservativo antes de follarla, pero mi cuñado me invita a follarla a pelo, sabe que yo tengo la vasetomia echa, me dice que sin problema, secorrio mi cuñado de ver el principio y se fue al baño nos dejo un rato largo, volvio como a los veinte minutos y ahora su mujer quien me cabalgaba.

mi cuñado me preguntaba si aguntaba siempre tanto para correrme, le dije que no tenia un tiempo, pero las primeras veces que follaba con alguien y con toda esta situacion, pues habia mucho morbo, pero tambien muchos nervios.

Ese dia fue el inicio de una amistad mas profunda con mis cuñados, no me imaginaba que mi cuñado eran tan cornudo y sumiso, ni que mi cuñado con la cariña de no matar una mosca, fuese tan zorra, la relacion aun dura, ahora mi cuñada le ordena a mi cuñado que me chupe la polla y le coma el coño a ella a teminar de corrernos






Milú

 —Mónica… por favor, que nadie me moleste… no me pases ninguna llamada. Voy a estar reunido con la Sra. Ofelia y no quiero que me pases llamadas— le digo a mi secretaria desde la puerta de mi despacho.

La tal señora Ofelia es una mujer muy especial que requiere una tratamiento especial. Su reputación como mujer caprichosa y que consigue todo lo que quiere le precede. Debe rondar los cincuenta y a pesar de ello mantiene un cuerpo extremadamente sexy, bien cuidado y naturalmente bien dotado. Buena figura, curvas esplendidas, una melena castaño claro y una cara hermosa.

Antes de volver a mi sillón tras la mesa del despacho, me siento prisionero de la tal Ofelia. Esta señora, de la alta sociedad, lleva casi un mes tras de mí. Ella tenía mucho interés por concertar la entrevista de hoy. Yo le daba largas pues su fama de mujer extravagante le precede.

Por teléfono me había avanzado que tiene intención de poner una demanda judicial a su vecina. Lo que alega es un agravio por mal trato a los animales; el delito que pretende denunciar con mi asesoramiento legal es: que su vecina asusta a su perrita cuando se asoma por la verja que separa sus casas.

Me parecía una tontería y siempre encontraba alguna excusa para no atenderla. Finalmente, su marido que es un influyente hombre de negocios, me llamó muy enfadado y tras un corto recordatorio de algunos asuntos que tenemos en común, terminó imponiendo la visita de su caprichosa esposa en mi agenda.

Hoy, la señora Ofelia  se ha presentado a media mañana, subida en unos altos tacones de aguja, vistiendo un ceñido vestido de generoso escote y con actitud condescendiente.

Pronto ha empezado a utilizar su arma más mortífera para convencerme acerca de su pretensión. Ha cruzado las piernas con desparpajo, primero a un lado y luego a otro, enseñándome sus hermosas piernas. Me he imaginado su entrepierna libre de braguitas siguiendo el ejemplo de la famosa película.

De vez en cuando se inclina sobre la mesa de trabajo, con lo que sus pechos rozan la superficie y me enseña su hermoso canal entre esas deseadas curvas. En fin, que me ha calentado bien y ahora pretendo que en la intimidad entre abogado y clienta podamos profundizar más en averiguar sus intenciones y deseos.

En el trayecto hacia mi sillón me aborda sin contemplaciones, lleva su mano encima de mi paquete.

—Ven aquí pichoncito— dice mordiendo las palabras mientras las pronuncia.

—Creo que nos vamos a entender bien. Por fin mi perrita "Milu" tendrá un buen abogado"— susurra mientras me agarra el paquete con sus largos dedos.

—Tengo que decirle que… será un proceso largo.. con pocas garantías de éxito"— le advierto.

—Estoy segura que podrás todo lo que haga falta… y más"— dice la señora mientras me desabrocha el cinturón y los botones del pantalón.

Mete la mano por la bragueta y me toma la polla hinchada por encima de la tela del boxer.

—Estoy segura que estas bien dotado para llevar este asunto… y no debes temer por lo que pueda costar… mi marido pagará todo lo que su mujercita le pida… y yo te ayudaré en todo lo que pueda— me dice mientras saca mi polla al aire, al tiempo que mi ropa queda arrugada alrededor de los tobillos.

Me empuja hacia atrás hasta que apoyo el culo contra mi mesa. Me da tres meneos fuertes haciendo que el capullo salga violentamente de debajo del pellejo.

—Uhmmm no está nada mal… para un abogado principiante— me dice con sorna para picarme—tienes un buen argumento aquí abajo.

Luego me pajea un poco, juega con mis huevos, acaricia mi vientre y mis muslos. Se detiene un instante. Yo resoplo impaciente deseando que continúe rápido con sus artimañas. La señora Ofelia, con mucha tranquilidad y con cuidado de no dañar el vestido, se lo desprende de los hombros y se lo baja hasta la cintura.

Su sujetador blanco es última moda… con los bordes con grandes encajes de flores le mantienen erguidas unas hermosas tetas. Sin pensárselo mucho se lo quita ofreciéndome con sus manos este rico manjar.

Luego, con un gracioso movimiento de caderas, hace que el vestido termine de caer al suelo. Tal como sospechaba no lleva bragas. Un cuidado triángulo de pelitos me indica el camino de una suculenta conchita.

Ofelia me acorrala contra la mesa, y tras exhibir coqueta su cuerpo apetitoso me agarra la polla con fuerza y determinación. Rodea el capullo con la mano apretando suavemente. Luego de un tirón baja el pellejo hasta tropezar con su mano con mis huevos que se apretujan contra la base del pene.

Luego, sube la piel lentamente hasta casi cubrir de nuevo el capullo, y vuelve a bajarla rápidamente. Esto lo repite varias veces y me llena de placer. Suspiro y resoplo cada vez que la hace. Ella me mira observando las reacciones de mi cara. Sabe que lo que está haciendo tiene un efecto demoledor…tiene una buena mano.

Tengo el capullo super hinchado e intensamente rojo. Está tan sensible que los roces de sus manos me producen quemazón y algo de dolor. Ante mis gemidos, Ofelia se dispone a dar el toque de gracia. Hace un mohín con los labios y recoge la punta del capullo. La moja con saliva y poco a poco la engulle hasta que desaparece totalmente dentro de su boca llegando hasta la garganta

En un momento de distracción, tomo su cabeza entre mis manos, las coloco sobre sus oídos y la sujeto con firmeza. Me balanceo adelante y atrás despacio, me follo su boca como nunca había imaginado…Mientras lo hago ella sorbe con fuerza aumentando la fricción de su boca sobre mi capullo…Uffff! Como la chupa la cabrona!. Para alcanzar este grado de maestría seguro que no es la primera polla que se come, y yo recibo el regalo de su experiencia.

Empieza a meterla y sacarla de su boca, girando la cabeza como si se atornillara al meterla. Al tiempo, su mano sigue frotando con ganas en mi polla, mis huevos y la entrepierna. Me pajea y me la chupa al mismo tiempo. Es sensacional. Continua hasta que empiezo a retorcerme de gusto y varias andanadas de semen salen disparadas.

 Veo como mi leche blanca destaca sobre sus labios pintados de rojo carmín, como su lengua juguetea con las gotas mientras se relame, se muestra orgullosa del resultado y se regodea vanidosa…¡ha conseguido lo que se había propuesto!

La señora Ofelia la recoge en su boca y luego la traga satisfecha. Golosa recoge las tímidas gotas que van terminando de salir y los restos que han quedado repartidos por el pliegue debajo del borde del capullo. Las piernas me flaquean por la emoción, un tembleque inoportuno se apodera de mí sin poder controlarlo.

Cumplido su objetivo, se viste sin esperar que yo pueda hacer algo para complacerla. No desea tener sexo conmigo, solo quería conseguir que yo me corriera en su boca… bajo su control.

—Si tienes algún otro reparo para llevar adelante mi asunto, me lo dices y con mucho gusto colaboraré en lo que haga falta— me sugiere antes de abrir la puerta y salir de mi despacho.

El contrato entre clienta y abogado está correctamente redactado y firmado por ambas partes. No cabe duda que Ofelia ha venido a la negociación con una argumento muy claro y contundente.




Hijo de amiga


Cuando ndo ya has malgastado la mitad de tu vida haciendo lo que se supone que es correcto y aun así apenas has obtenido satisfacción alguna, quizás sea el momento de pasar a hacer lo que realmente te apetece. Me costó mucho llegar a esa conclusión, pero hizo que todo cambiara y también que me metiera en algún que otro lío.


De jovencita, mi amiga Arantxa y yo decíamos que la adolescencia era para experimentar. Ese pensamiento no lo podíamos expresar en presencia de nuestros padres, ya que eran muy estrictos, pero encontrábamos la forma de dar rienda suelta a nuestras ganas de disfrutar. Un cigarro al salir de clase, un cubata en el bar los fines de semana cuando pensaban que estábamos en la biblioteca o un morreo con el gupaeras del barrio después de montar en su moto. Esa era nuestra forma de revelarnos.


A partir de los veinte todo se volvió más salvaje. Sin control parental, fumamos, bebimos y follamos lo que nos dio la gana. Siempre juntas, contando la una con la otra. Aunque nos dijeron que con los treinta llegaba el momento de centrarse y sentar cabeza, nos prometimos que seguiríamos de juerga permanente hasta que el cuerpo aguantara.


Nunca pensé que Arantxa fuese a incumplir nuestra promesa, pero la presión le pudo. Todo a nuestro alrededor eran bodas y embarazos, y ella no quería ser señalada como la eterna solterona descerebrada. En cuanto uno de sus ligues le demostró poderío económico, se comprometió con él y comenzó a parir niños.


Consiguió que dudara, pero seguí con el mismo ritmo de vida. Salía con hombres de mi edad y me divertía. El sexo era lo más importante en esas relaciones, pero también quería pasarlo bien, tener romances de fin de semana que no se vieran estropeados por el maldito compromiso. Mientras Arantxa criaba a sus hijos, yo me alejé de ella.


Para cuando quise replantearme mi vida ya era demasiado tarde. No tenía edad para ser madre y me tenía que conformar con los desperdicios que todavía estaban solteros o con ser la querida de algún hombre casado. Eso último no me hacía sentir bien, pero era la única opción que me quedaba para que alguien me valorara.


Veía en las revistas a las famosas adineradas que se liaban con chicos mucho más jóvenes y en el fondo sentía cierta envidia. Yo ya no conseguía encontrar a nadie que me diera auténtica caña, pero tampoco quería caer en el error de ir detrás de veinteañeros, jóvenes con dos décadas menos que yo, porque me parecía patético, algo más bien típico de los hombres.


Fue por culpa de esos prejuicios por lo que acabé atada a un señor casado que solo me hacía promesas y apenas me daba satisfacciones en la cama. Cuanto más lo pensaba, menos entendía qué hacía con ese hombre que no me llegaba ni a la suela de los zapatos, pero la idea de dejarlo me daba vértigo, porque me vería sola con casi cincuenta años.


Ese miedo que tenía a la soledad fue lo que hizo que retomara el contacto frecuente con Arantxa. Sus tres hijos ya eran bastante mayores y eso le daba tiempo para vernos de vez en cuando. No me juzgó en ningún momento ni me dijo que ya me lo había advertido, simplemente volvió a mi lado como la buena amiga que siempre fue.


- Te agradezco que saques tiempo para mí, Arantxa.


- Tranquila, si mis hijos ya no me necesitan para nada.


- ¿Qué edad tienen?


- Las mayores ya pasan de los veinte y Edgar tiene casi diecisiete.


- ¿Y se apaña bien solo?


- Sí, el llega del gimnasio muerto de hambre y se prepara cualquier cosa.


- Vaya, ¿te ha salido deportista?


- Demasiado, a veces me preocupa que solo piense en eso.


- Pero si es un musculitos no le faltarán las chicas.


- Supongo, pero solo lo veo salir con sus amigos.


- ¿Y tu marido cómo está?


- No lo sé, hace tiempo que no le pregunto.


- Tienes un matrimonio idílico...


- Como todos después de tantos años.


- Pues aun así te envidio.


- Bueno, tú decidiste llevar esta vida.


- Lo sé, pero tengo miedo a quedarme sola.


- La compañía está sobrevalorada. Yo volvería atrás en el tiempo para follar más.


- El mercado de hombres no es que esté muy interesante.


- Los de nuestra edad no, pero hay unos jovencitos en mi clase de pilates...


- Se nos pasó el tiempo de ir detrás de los chavales.


- Habla por ti, Isabela.


Que mi amiga no viera con malos ojos la posibilidad de tener algo con un muchacho más joven hizo que llegara a plantearme esa opción. Quizás no fuese un escándalo si únicamente me dedicaba a disfrutar de esos cuerpos en la intimidad de mi casa. Al fin y al cabo, a mi edad, todavía tenía mucho que ofrecer.


Aunque me conservaba bastante bien, decidí apuntarme a todas las clases que hacía Arantxa, ya que ella estaba aún mejor que yo. Quería quemar unas cuantas calorías y tonificar todavía más mi cuerpo antes de hacer un intento que me dejara en ridículo. Sabía que había chavales que fantaseaban con las maduritas como yo, pero tampoco quería atraer a cualquiera, tenía que ser uno que realmente me pusiera cachonda.


Me fui poniendo en forma a la par que recuperaba el tiempo perdido con mi amiga. Encontré a una Arantxa muy cambiada respecto a nuestra última época, pero bastante similar a la que fue durante la adolescencia. Según me dijo, todavía no se había atrevido a ponerle los cuernos a su marido, pero era algo que tenía en mente.


Cada una de las clases que hacíamos juntas se convirtió en la demostración de lo mucho que ambas necesitábamos salir de nuestra rutina. No solo Arantxa necesitaba una aventura, yo también tenía que deshacerme con urgencia de ese señor al que había estado pegada durante los últimos meses. Si existía una posibilidad de recuperar la ilusión, sería junto a mi amiga.


- Isabela, mira ese qué brazos tiene.


- Dudo que tenga más de veinte años.


- Pues mejor, más energía.


- Justo lo que necesito, la verdad.


- ¿Cuánto llevas sin echar un polvo?


- Más de tres meses.


- Pero si me dijiste que estabas un hombre.


- Sí, pero está casado, apenas tiene tiempo para mí.


- ¿Y por qué lo sigues viendo?


- Al principio me decía que iba a dejar a su mujer por mí.


- Nunca lo hacen. Espero que al menos sea bueno en la cama.


- Qué va, si casi no se le levanta.


- Mándalo a tomar por saco.


- Es que no me quiero quedar sola, Arantxa.


- Ahora me tienes otra vez a mí... y a un montón de cachas a tu disposición.


No fue sencillo, pero siguiendo los consejos de mi amiga, me deshice de ese hombre que no merecía pasar ni un solo segundo más a mi lado. Volvió a prometerme que rompería con todo para estar conmigo, pero yo ya no estaba dispuesta a creerme sus mentiras ni las de nadie. Una nueva Isabela estaba a punto de emerger y pensaba vivir la vida sin preocuparse por nadie.


A Arantxa y a mí todavía nos faltaba un poco de confianza para lanzarnos a por los chicos, sin embargo, entre nosotras la habíamos recuperado por completo. Cuando terminábamos las clases siempre íbamos a tomar algo, hasta que un día me dijo que fuésemos a su casa. Yo, que llevaba muchos años sin ir por allí, acepté encantada.


Era una casa enorme. Tenía tres plantas, garaje y jardín con piscina. De haber encontrado en mi juventud a un hombre que me hubiera ofrecido todo eso, yo también me hubiera casado. Estábamos las dos en el salón tomando un té cuando Arantxa recibió una llamada telefónica y se alejó para hablar. A los pocos segundos, llegó Edgar, el hijo de mi amiga. Pese a su juventud, no tenía nada que envidiarle a los cachas de nuestras clases.


- ¿Hola?


- Hola, Edgar. Tú no me recuerdas, pero soy Isabela, la amiga de tu madre.


- Encantado de conocerte. He oído hablar mucho de ti.


- Espero que bien.


- Bueno, la mayoría de veces.


- Vaya...


- Tú eres la que prefirió seguir llevando una vida de puta, ¿no?


- ¿Eso te lo ha dicho tu madre?


- No, pero escuché cómo se lo decía a mi padre.


- Pues no, no es así.


- Yo no te juzgo, cada uno hace con su cuerpo lo que quiere.


- ¿Tú que haces con el tuyo?


- De momento, muscularlo.


- Eso salta a la vista.


- También se nota que tú trabajas el tuyo.


- Igual que tu madre.


- Sí, pero ya quisiera ella estar la mitad de buena que tú.


Arantxa volvió al salón y Edgar se fue para su cuarto. Solo habían pasado unos minutos, pero habían sido suficientes para cambiarlo todo. Saber que mi amiga pensaba eso de mí no me sentó nada bien. Cuando estaba conmigo siempre me apoyaba y decía comprenderme, así que no me esperaba lo que acababa de descubrir mediante su hijo.


Aunque el piropo que me había dedicado Edgar hizo la traición más llevadera. Saber que un chico tan joven y atractivo pensaba que estaba buena era toda una inyección de autoestima. Yo también quedé impactada con su presencia y no pude evitar pensar que era justo lo que estaba buscando. Solo tendría que esperar un tiempo, hasta que fuese mayor de edad.


Pero las supuestas palabras de Arantxa hervían en mi cabeza, al igual que la idea de vengarme mediante su hijo. Antes de hacer nada de forma precipitada, decidí fingir normalidad mientras seguía a su lado y allanaba el camino hacia Edgar. Con esa idea en mente, seguí como si nada, asistiendo a cada clase y hablando con ella de jovencitos, como siempre.


- Isa, tenemos que animarnos.


- Hablas mucho, pero luego no te atreves.


- No es tan sencillo. Estoy casada, no puedo llevar al amante a casa.


- Tranquila, que si ligas yo te presto la mía.


- ¿En serio?


- Claro, no pasa nada por ser un poco puta.


- ¿Por qué dices eso?


- Por nada... cosas mías.


A partir de ese momento, Arantxa llevó la iniciativa y comenzó a acercarse a algunos jóvenes. Disfruté bastante viendo como la ignoraban a pesar de que ella creía que iba a ser como pescar en un barreño. Por mucho que nos conserváramos bien para nuestra edad, esos chicos tenían alrededor de veinte años y no a todos les daba morbo acostarse con maduritas.


Yo me mantenía en un segundo plano viendo como ella hacía el ridículo. Ofrecía a los muchachos ir a tomar algo y la mayoría le decían que no. Pero hubo otros que le preguntaron si yo estaba incluida en el plan, haciendo que mi amiga tuviera que ocultar la rabia. Podría haber dicho que sí, pero en ese momento mi único objetivo era Edgar.


Viendo su escaso éxito, mi amiga decidió usar tácticas más agresivas. En vez de hablar de tomar algo, ofrecía a los chicos ir a su casa para unas lecciones extra. Como hombres que eran, la idea de sexo asegurado, aunque fuese con una cincuentona, les hacía dudar más, aunque seguía sin conseguir el sí de ninguno de ellos.


Mientras yo seguía en mi papel de amiga ideal, Arantxa perdía la poca dignidad que le quedaba. Me hacía ir todas las tardes a su casa para planear estrategias de ligue. Yo estaba encantada, ya que así podía ver a Edgar, cada día más fuerte y atractivo. Ese chico me comía con la mirada cada vez que nos crúzabamos, pero yo esperaba el momento oportuno para lanzarme. Hasta que eso sucediera, tenía la oportunidad de conocerlo mejor.


- ¿Otra vez por aquí?


- Tu madre no puede vivir sin mí.


- Yo tampoco puedo, Isabela.


- Seguro que eso te funciona con todas las chicas.


- No lo sé, nunca lo he probado.


- Y yo voy y me lo creo.


- Te lo digo en serio, todavía no he intentado seducir a nadie.


- ¿Prefieres que se acerquen a ti?


- No es eso... es que las niñatas me aburren.


- Claro, porque tú eres muy maduro.


- Madura eres tú. Eso es lo que me pone.


- Eso es que ya te has cansado de las de tu edad.


- Imposible, porque sigo siendo virgen. De momento...


Que Edgar estuviera sin estrenar me daba mucho morbo, pero no podía negar que también era un poco decepcionante. No solo deseaba probar carne joven, también quería que me dieran duro, y eso iba a ser complicado sin experiencia. Aun así, las ganas que tenía de vengarme de mi amiga por llamarme puta hicieron que siguiera adelante con el plan.


Ese plan todavía parecía lejos de poder cumplirse. Sin embargo, Arantxa acabó encontrando a un pobre incauto que aceptó esas supuestas clases extra. Para conseguirlo, tuvo que rebajar muchísimo sus exigencias. Empezó con los que estaban más buenos y acabó convenciendo al más enclenque del lugar. Un niñato que llevaba dos días por allí y que también tenía pinta de no haber visto un coño en su vida.


- Sigue en pie lo de dejarme tu casa, ¿no?


- Sí, claro, pero mientras te lo follas yo me refugiaré en la tuya.


- Sin problema, ya empieza a hacer buen tiempo, inaugura el verano en la piscina.


- Esa era mi idea, estrenarlo.


Al terminar la clase nos intercambiamos las llaves de nuestras casas y Arantxa se fue directamente a la mía con su casi imberbe amante. Yo me dirigí a su chalet, con la idea de hacerle caso y esperar a Edgar en la piscina. Rebusqué en los armarios de mi amiga y me puse su bikini más provocativo. Como yo tenía más curvas, apenas me contenía las tetas. Era perfecto.


Tras darme un baño rápido, estiré mi cuerpo húmedo sobre una hamaca para que eso fuera lo primero que viese el joven al llegar. Apareció a la misma hora de siempre y mi presencia no pasó inadvertida para él. Salió al jardín y ni siquiera se esforzó en disimular, me miró descaradamente los pechos. Eso me excitó muchísimo.


- ¿Dónde está mi madre?


- Ha quedado con su amante.


- Muy bueno.


- Ha tenido que irse, ¿te valgo yo?


- Pues depende de si estás dispuesta a darme dinero para salir esta noche.


- No, pero quizás si pueda darte otra cosa.


- ¿De verdad?


- Solo si eres un buen chico.


- Soy el mejor.


- ¿Qué querrías que te diera?


- Un besito... ¿sería mucho pedir?


- ¿En la cara, en la boca o lo quieres en la polla?


- Los quiero los tres.


Me puse de pie, coloqué una mano en su cuello y le di un beso en la cara. Acto seguido besé sus labios. Después lo miré a los ojos y descendí lentamente hasta colocarme a la altura de su paquete. Tras el pantalón de deporte se intuía un bulto descomunal, era obvio que el par de besos habían sido suficientes para hacer que se empalmara.


Posé mis labios sobre su tranca y la besé a través del pantalón. Edgar se quejó y yo sonreí maliciosamente, sabiendo que el joven quería mucho más. Poco a poco se lo fui bajando, hasta que su enorme pene quedó liberado y me apuntaba directamente a la cara. En vez de un beso, recorrí el tronco entero con mi lengua, desde la punta hasta la base.


Edgar trataba de contenerse, pero se notaban sus ganas de clavármela hasta la garganta. Me introduje su glande en la boca y eso lo hizo gemir. Se lo cubrí de saliva y comencé a engullir muy despacio, tragando cada milímetro de su gran barra de carne. En mi mente nunca estuvo la idea de satisfacerlo sin obtener nada a cambio, pero hacía tanto tiempo que no mamaba una verga tan joven que no lo pude resistir.


Mis movimientos de cuello cada vez eran más veloces. Edgar se atrevió a sujetarme la nuca y empujaba sutilmente para que me la tragara entera. El joven parecía a punto de correrse, pero aun así no me dejaba parar ni siquiera para coger aire. Estaba decidida a pedirle que después me comiera él a mí el coño y aplazar la emoción del polvo para otro día.


Su forma de jadear me indicaba que estaba a punto de tener un orgasmo. Mi idea era parar y pajearlo hasta que se corriera sobre el césped. Pero antes de que eso sucediera, me sonó el móvil, que seguía en la hamaca. No tenía intención de cogerlo, pero vi que era Arantxa y preferí no darle motivos para que sospechara. Aunque Edgar protesto, decidí atender la llamada.


- ¿Todo bien, amiga?


- No, no me he atrevido a hacerlo.


- ¿Por qué?


- Ahora te cuento, estoy llegando a mi casa.


Mientras hablaba con su madre, Edgar se la meneó y eyaculó en mi cara, llenando de semen incluso el teléfono. Tenía muy poco tiempo antes de que llegara, así que no podíamos seguir, pero tenía claro que debía estrenar al hijo de mi mejor amiga.


Continuará...



Novio de una puta

 Quizás la puta soy yo por liarme con el novio de otra, pero yo fui la primera que seA SA fijó en él, cometí el error de hablar sobre el con...