Seguidores

viernes, 25 de agosto de 2023

Cantos de sirena

 Ese año habíamos decidido que las vacaciones las iniciaríamos los chicos solos hasta que tres días después por motivos de trabajos vinieran también las chicas, nuestras parejas. Ya nos conocían bien y sabían que lo peor que haríamos solos era beber mucho mucho y puede que un poquito de droga blanda, nada grave.


Así fue, bebimos como posesos, sin ser conscientes de problemas cardíacos, respiratorios o gástricos, ya después de vacaciones volveríamos a la rutina y las visitas a médicos que nos prohíben cualquier tipo de exceso, pero estábamos de vacaciones y solos.


Hablamos de nuestras parejas, de la pareja de los demás de la cantidad de cosas que le haríamos a cada una, no había posibilidad de ofensa ni de enfado puesto que éramos muy amigos y sabíamos que lo que estábamos diciendo solo eran ilusiones animadas por el alcohol.


Faltaban dos días para que vinieran las jefas y otra noche nos volvimos a emborrachar sin saber cuando parar de beber. Esta vez, yo me retiré antes porque me estaba doliendo la cabeza y no me apetecía beber.


Aunque estaba de vacaciones, mi cuerpo seguía sus costumbres de levantarme temprano con las primeras luces del día, el dolor de cabeza había desaparecido y me apetecía ir a dar un paseo por la playa cuando todavía no está llena de gente. Me vestí con un un bañador una camiseta de manga corta y unas chancletas cómodas y me fui a inspeccionar la playa tranquilamente.

Me estaba gustando mucho el paseo para relajar mi y estirar las piernas.


La auténtica sorpresa llegó cuando vi una chica de unos 25 años que se estaba lavando o quitando la arena la orilla de la playa, estaba desnuda y yo evite establecer contacto con ella para no ser un mirón, yo solo había salido a caminar, pero estaba tremenda y de ver como enjuagaba sus nalgas y pechos, no podía apartar mi vista de este espectáculo pero cambie un poco mi rumbo.


Todo controlado ahora mi vista se dirigía al camino de vuelta, pero la chica dio un pequeño grito solicitando mi ayuda por qué se le había dormido un pie y no podía salir del agua, la ayude sujetándola entre mis brazos y sacandola a la orilla, en el transcurso del viaje de unos cinco metros pude apreciar bien sus pechos gorditos sus labios gruesos y sus piernas y nalgas muy duras. No era ser baboso es que la estaba sujetando mientras íbamos a la arena y se notaba.


Parecía brasileña por como hablaba, pero nos entendíamos bastante bien, se quedó tumbada en la arena haciendo topless, aunque ella ya estaba muy bronceada decía que le gustaba sentir el sol sobre su piel. Cuando ya decía que estaba recuperada yo empecé a despedirme y ella me dijo que si me había gustado la playa, la playa y las vistas, jeje


Sí claro que me ha gustado ver la playa


Solo la playa?


(La cabrona me había visto babear)


Y las vistas también


Sí, se debe disfrutar de todo


Le hablé un poco de mi situación que estaba con unos amigos y que en día y medio llegarían nuestras esposas,...


Pero ahora estás solo aquí conmigo, ayudándome y yo querría agradecer tu ayuda, con un beso, sabes que solo con un beso puedo hacer que te corras?


Ja ja un beso donde?


En la boca, no seas mal pensado


Me temo que no te creo


Déjame probar

Me beso con sus labios gruesos y su lengua juguetona y me calentó bastante pero no me corrí y le dije que no era verdad lo que decía.


Déjame intentarlo otra vez y ya verás.

El beso me había gustado mucho y no tuve problema en repetir la sensación de verme atrapado por unos labios gruesos y una lengua muy activa dentro de mi boca.

Pero tampoco me corrí aunque note algo de actividad de mi pene


Nada no debe ser hoy el día jejeje


Dame un tercer intento por favor que si no me deprimo por haber perdido mi poder


Volvió a besarme y ahora sujeto mis manos y las puso sobre sus pechos, moviendo las y apretando para que palpase bien.


Tampoco me corrí, pero me la despertó bien dura y ahora fui yo quien la beso, me maje el bañador de forma que mi pene quedaba justo apuntando a su entrepierna.


Se puso a reír supongo que porque había conseguido su objetivo. Sin hablar me la meneo soltando mi esperma al mar. Me la comió un poco para que se me pusiera dura y metidos en el mar cogimos hasta que estábamos agotados.


Me había gustado muchísimo lo que había pasado y le preguntes si podíamos quedar más veces,

 pero me dijo que las sirenas no repetían con humanos.

En 5 meses estaba divorciado y los cantos de sirena me estaban haciendo perder la cabeza 




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Antigua amiga 3

 Continúe hablando con mi amiga casi a diario y con la esperanza menos por mi parte de volver a echar un buen polvo con ella . Por cosas de ...