Mudanza

 He tenido que mudarme porque he cambiado de ciudad donde ahora vivo.

Un lío gordo pero era algo que había que hacer y busqué cajas para guardar cuadros, libros, discos de música y muchas otras cosas que sin darnos cuenta vamos acumulando en las casas.

Primer problema resuelto

El siguiente problema o dificultad era buscar una empresa de transportes barata porque apenas tengo dinero.

Yo me tenía que ir de aquella casa , no tenía mucho dinero, busque y busque empresas de transporte baratas y no me llegaba el dinero, tuve la suerte de que un amigo me hablase de un conocido suyo que de forma pirata hacía ese tipo de servicio bastante barato.

Me posee en contacto con el, y concertamos un precio por su trabajo, pensaba que para el día de la mudanza tendría el dinero.

Ya el día de la mudanza llegó con una furgoneta él solo se encargó de bajar mis cosas y meterlas en la furgo y emprendimos el viaje.

No sabía cómo decirle que me iba a faltar un poco dinero del acordado, no mucho aproximadamente el 25b% de la cantidad acordaba.

A medida que nos acercábamos al destino me ponía más nerviosa y me preguntó que si estaba bien o que si me basaba algo

Cuando no pude aguantar más, se lo dije y dio un frenado diciéndome que si estaba de broma muy serio, que si no tenía dinero no lo hubiese avisado, y que que a falta de dinero se quedaría con algunas de las cosas que llevamos

Le pedí perdón y le dije que le pagaría un poco más adelante.

Llegamos y se puso a descargar todo valorando lo que le gustaba para quedarselo, le suplique que no se quedara con nada pero siguió mirándolo todo.

Estaba metida en un lío y asustada, cuando él me dijo que podía haber una forma de pagar.

Le pregunte cuál y riéndose me dijo que podíamos pasar un buen rato juntos y deuda saldada 

El tío no estaba mal del todo y aunque un poco has quedada por la situación, accedí a su opción de pago , con tíos peores me había acostado antes.

Fue más cuidadoso de lo que yo hubiera imaginado cuando me agarró y comió mis pechos con calma y pasión jugando con mis pezones.

Sus dedos gruesos encontraron cobijo entre mis piernas por delante y por detrás y me provocó un orgasmo, luego paso sus labios y su lengua por mi panocha hasta que me volví a venir.

Estaba encantada con la mudanza, lo barata que me iba a resultar y el buen rato que me estaba dando 

Para rematar me puso a cuatro patas y me la metía de un sitio al otro casi sin parar hasta que se vino dentro y se marchó, diciendo que para otra mudanza ya sabía su teléfono.