Seguidores

jueves, 17 de abril de 2025

Cuando está sola

 No creo que lo que voy a contar es algo raro, pero nunca me había pasado y pues me gustaría contar. 

Después de un tiempo pretendiendo a una chica con la que yo creía y veía que me seguían el rollo, más de una vez de meternos mano, muchos besos y caricias... llegó el un día que yo llevaba tiempo esperando. 

Salimos a tomar algo y bailar... empezó a llover, vaya como estoy en el cielo se estuviese cayendo, estábamos bastante cerca de su casa y ella me dijo que fuesemos a su casa por qué íbamos a acabar empapados por la lluvia. 

Llegamos pasamos y aprovechando que ya estábamos algo empapados, nos fuimos quitando algo de ropa mientras ya estábamos tocándonos

Una vez más ya estábamos disfrutando de recorrer con la boca y estimular el cuerpo del otro. 

Fuimos a su dormitorio casi ya completamente desnudos, qué ricura de pechos, se me quería salir el pene del calzoncillo y creo que eran algo que ellos esperaba, jajaja 

Yo había olvidado los condones, pero ella me dijo que no importaba porque ella tenía en la mesita. Rápidamente me dirigí a la mesita al cajón de arriba, pero allí solo había braguitas, cosa que me la puso aún más dura, abre el cajón que había debajo y o sorpresa!!! Allí estaban sus juguetes sexuales.

Ella vino rápido y me dio un manotazo diciendo que era demasiado curioso, estaba muy seria, casi con cara de muy mala leche, lo que pasa que hace como estaba desnuda con los pezones casi amenazantes y mirando mi polla fijamente, acabó riéndose mientras decía que yo ya había descubierto cosas que no tenía por qué saber, que ahora, como en las películas de espías, tendría que matarme. 

No recuerdo bien como llegamos a eso pero después de haber estado un rato cogiéndonos, en un descanso, surgió la idea de qué como castigo o privilegio por haber descubierto sus juguetes tendrían que probarlos yo! 

Yo elegí unas esposas y una mordaza, pero ella me dijo que eso era una mariconada y eligió un dildo!!. Yo intenté decirle que ni lo pensase, que yo tenía tuberías de salida no de entrada, ella me dijo: 

Relájate y disfruta, entre risas me puse en cuatro pidiéndole que no fuese bruta, vaya situación, yo en cuatro y ella al mismo tiempo que me la jalaba, hacía presión con su dildo en mi culo, el dildo no era demasiado grande, unos catorce centímetros de largo y unos ocho de circunferencia, con sus venitas y todo.

Al poco tiempo de haber jugado con sus jugos su saliva y algo de mis jugos para lubricar mi culo, lo empezó a meter despacio y pues no fue nada traumático, aunque no me apetecía que eso tuviese mucho tiempo así.

Perdí la noción del tiempo porque empecé a notarlo como algo placentero, de hecho me vine abundantemente 

Ella solo reía y se recreaba cogiéndo mi culo con su juguete. En las siguientes veces que hemos quedado, ella siempre me propone si quiero que volvamos a jugar con su juguete, yo no sé por qué pero me hago el macho y le digo que ni loco otra vez eso, aunque tengo que confesar que no me resultó un problema usar ese juguete que ella dice que es  PARA CUANDO ESTÁ SOLA 





No hay comentarios:

Publicar un comentario