Somos amigos desde pequeños desde muy pequeños desde que empezamos a ir al colegio y siempre nos contamos todo y ya tenemos los típicos comentarios de zoología : que zorra eres y tú un cabronazo… cada vez que comentamos algún roce carnal.
Nunca hemos tenido entre nosotros un roce carnal de esos, hasta hace cinco días que debido una confusión, según me dijo, me envió un WhatsApp con un vídeo en el que se la estaba meneando. No era nada nuevo para mí ver su verga igual que no era nuevo para el ver mi cuerpo desnudo, no había atracción sexual entre nosotros.
Le envié un WhatsApp diciéndole que se había equivocado de destinataria de su WhatsApp
Me dijo que había sido un descuido y que no había destinataria para ese vídeo, que solo le había apetecido grabarlo y que por accidente me lo había enviado
De broma le dije que qué raro era que no tuviera destinatario para ese vídeo, porque él era bastante activo y tenía tirón entre las chicas
Contestó diciendo que lo creyera o no, no había candidata a… por bastante tiempo.
Creí que era una tontería de mi amigo, pero algo me hizo sentir ver ese vídeo como se la meneaba, me humedeció la panocha.
Al día siguiente volví a whatsappear con él y noté que seguía un poco apagado. Tenía un plan y no sabía si avisarlo o no, al final no lo avisé y me planté en su casa para ver cómo estaba, lo encontré un poco deprimido y le propuse salir a dar una vuelta a un un bar un restaurante y al cine o lo que fuera.
Dijo te prefería quedarse en casa que el ya tenía bebidas allí y que si quería ver una peli la podíamos ver en la tele.
Por un momento pensé que no tenía nada que yo pudiera hacer, pero caí en la cuenta de que podíamos hacer algo que aún no habíamos hecho juntos y fingiendo que tenía calor me fui quitando algo de ropa, baje un poco las persianas para no alegrar demasiado a los vecinos.
Me dijo que que estaba haciendo y solo le dije que hacía honor a cuando él me llamaba zorra. Cuando me di cuenta solo tenía ropa interior y mis braguitas estaban ya un poco mojadas, hasta ahora habíamos sido intocables uno para el otro el terreno sexual, pero tontos no éramos y no tarde en notar que la tenía dura bajo el pantalón. Nos conocíamos perfectamente y no hicieron falta palabras para acabar de desnudarnos y ir lamiendo el cuerpo del otro.
No me apetecía chupársela pero así que le hice una buena paja, el atacó mis puntos débiles, mi cuello mis pezones y mi monte de Venus y consiguió que me corriera
Luego nos pusimos a coger con mucha pasión y el cariño que había entre nosotros. Me encantaba sentir como me llenaba con su verga y la sensación de vacío que me quedaba hasta que volvía a empujar. Lo hacíamos sin condón porque sabíamos que los dos estábamos limpios de ETS y además yo tomaba la píldora.
Fue una tarde muy especial y ahora ya sabemos que somos una opción para el otro
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