Esta chica decía que no quería nada conmigo, impensable entrar a un sitio cerrado conmigo por no hablar de cualquier contacto sexual.
Creo que mi perrito hizo un gran trabajo por mi porque después de haber coincidido los dos paseando a nuestras mascotas, perrita ella y perrito yo, y que ambas mascotas simpatizasen entre ellas, empezamos a quedar para pasear las mascotas y tomar algo después.
Nuestros animales tenían sus idilios "amorosos" juntos y se enfadaban si intentábamos separarlos, de modo que como solian tardar poco, los dejábamos con lo suyo.
No queríamos ser unos: Capuleto ni unos Montesco que impidiesen el amor de nuestros Romeo y Julieta perrunos. De esta manera entre risas y miradas cómplices también nosotros empezamos a atraernos un poco .
Con la excusa de los perros salíamos yo buscábamos lugares donde nadie nos pudiera interrumpir las venidas los perros mirando y animándose a coger sin cuidar de que los viesen o no
No hay comentarios:
Publicar un comentario