Hace unos meses conocí a Lucas, un chico bastante animado y agradable, de pronto vi que me iba a resultar muy útil
Sólo tenía que hacerle creer que él era el macho y que mandaba. Fue fácil después de que viese mis pechitos o culo, yo loca con su rabo, es verdad.
Siempre estoy dispuesta a que me llene los agujeros de verga y leche, agarrando mi pelo o mi cadera
Le dejo "mandar" para que él me haga venir una y otra vez, que siga creyendo lo que quiera mientras mi horno siga calentito
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